"Fue un temblor corto, de unos 3 o 4 segundos, que parecía una explosión. Algunos vecinos se alarmaron y salieron a la calle, preocupados. La sacudida se apreció en varias aldeas y hubo alerta propia del susto, pero ningún daño personal ni siquiera material". El alcalde de Laza, José Ramón Barreal, habla así del seísmo de 3,3 grados en la escala de Richter registrado el domingo a las 23 horas de la noche. El epicentro estaba en Sarreaus, a 12 kilómetros de profundidad, pero el temblor, catalogado con grado III o "débil", se dejó sentir en buena parte del sur de la provincia. Según el registro del Instituto Geográfico Nacional, el pequeño terremoto fue percibido por la población en un total de 24 localidades de los municipios de Laza, Cualedro, Verín, Monterrei, Castrelo do Val, Trasmiras y Manzaneda, el más alejado.

"Varios vecinos notaron un movimiento. Aquí ya se han registrado varios temblores leves", dice el regidor de Cualedro, Luciano Rivero. En Sarreaus, "no tuvo mayor trascendencia. Se sintió, sí, pero sin mayor importancia. Mucha gente ni siquiera se dio cuenta porque ya estaba durmiendo, o de pie y no lo notó", comenta Gumersindo Lamas. "Sentimos como si la casa cayera y se levantara", dijo una vecina del municipio a la Televisión de Galicia. "Notamos un estruendo grande, seguro que explotó algo", comentó otra.

El Instituto Geográfico Nacional considera que se produjo un único seísmo, mientras que el 112 informaba ayer un total de tres temblores de tierra de magnitud 3.2 con epicentro en Laza, de 3.3, con epicentro en Trasmiras y otro con la misma magnitud y con epicentro en Sarreaus. Todos, aclaró la central de emergencias, percibidos por la población. El servicio recibió varias llamadas de distintos vecinos "que aseguraban sentir como explosiones". En Verín, según informaba ayer el 112, el temblor también se hizo notar "relatando algunos vecinos que sentían como se movía el suelo. En ningún caso, se llegaron a producir daños personales ni materiales".

A las 16.27 horas de la tarde de ayer hubo otro movimiento tectónico muy cerca del epicentro del domingo. Según el Instituto Geográfico Nacional, se registró un temblor de 2,5 en Vilariño de Conso, a una profundidad de 12 kilómetros. Al organismo no le consta que fuera percibido por la población.

Galicia registra ocasionalmente "enjambres sísmicos". Estas sacudidas entran dentro de la normalidad. "En Galicia no se registran grandes magnitudes sino pequeños temblores, especialmente en el triángulo Sarriá-Becerreá-Triacastela", describen desde el Instituto Geográfico Nacional, informa Patricia Pedrido.