"Gracias a todos los que os preocupáis por mí, pero no puedo hablar; no tengo palabras; es una tragedia" explicó desde Chile Brais González, el joven vecino de Vilamartín de Valdeorras, en Ourense, que sobrevivió al accidente que tuvo lugar en la madrugada del domingo en aquel país, y que dejo dos víctimas mortales y un herido grave, en lo que resultó una luna de miel truncada.

En ese siniestro, que se produjo al colisionar el coche en el que viajaban los cuatro ourensanos, con un camión, cuyo conductor se dio a la fuga, perdieron la vida la novia de Brais, Rosa Diéguez, de 32 años, la cuñada de esta, Francielly Lorraine brasileña de 24 años, y ambas vecinas de A Rúa (Ourense) y resultó gravemente herido el marido de Francielly y hermano de Rosa, Lorenzo Diéguez. Brais, que ya fue dado de alta a las pocas horas, ha tenido que enfrentarse desde entonces solo, y a 11.000 kilómetros de su casa, familia y amigos, a esta difícil situación.

Lo que estaba siendo un viaje turístico por Chile para celebrar la luna de miel de Francielly y Lorenzo, que habían contraído matrimonio dos días antes en aquel país, pues, el ahora viudo, tiene allí fijada su residencia por motivos de trabajo, acabó, como señaló Brais a sus familiares, "en una tragedia" que ha conmocionado al Concello de A Rúa, donde residían Rosa y su cuñada Francielly y al de Vilamartín, en el que vive Brais y donde la tres familias son muy conocidas y queridas.

"Lo que más hubiera deseado en el mundo es estar en Chile acompañando a mi hijo para darle un abrazo", explica César González, padre de Brais. El hermano de este último, Álex, el hermano de Rosa y otros familiares de las víctimas, llegaron ayer a la capital chilena.

Brais González, el joven que trabajó en una cantera de Valdeorras y ahora se preparaba para cumplir su sueño de sacar las oposiciones de Policía Nacional "y crear un hogar con Rosa, la panadera mas querida de A Rúa", indican los amigos, se vio truncado en segundos.

César González reconoce que "aunque mi hijo siga vivo, su novia era muy querida, llevaba ya casi diez años con Brais y ella también era familia para mi". Confirma que la repatriación tardará, días e incluso semanas.

" Rosa era lo positivo; la sonrisa"

En A Rúa, la panadería Lorenzo, es todo un símbolo del barrio de A Rúa Vella. La fundó y defendió Lorenzo, el padre de Rosa, tras enviudar y quedarse solo con tres hijos pequeños, "pero luego ella y sus hermanos la sacaron adelante y es una referencia. Recuerdo a Rosa como una sonrisa eterna; éramos vecinos y amigos desde niños; unas hora antes de irse me lanzó un "¡venga, vente con nosotros a Chile que vamos a la boda de mi hermano!". Ella y Brais eran dinamizadores sociales, colaboradores con todo lo que se hacía en A Rúa", explicaba emocionado a Faro Santiago Pimentel, presidente del Club de BTT Jabalíes de A Rúa, al que pertenecían Rosa y su novio. "Conozco parejas con química, pero la de ellos era única". En todas las redes sociales se suman los pésames de amigos, comisiones de fiestas y todo tipo de colectivos de dinamización social a los que pertenecían.

Francielly había partido también a Chile en agosto, para preparar la boda y establecerse allí con su futuro marido

La prensa chilena se hacía eco ayer de la mala fortuna de las "turistas españolas", como las denominan y de Francielly, "la mujer fallecida en su luna de miel".

"Soñaba con ser madre"

En medios como El Mercurio de Antofagasta recabaron declaraciones de familiares de Fran, como le llamaban familiarmente a Francielly, nacida en la Goiana brasileira, pero residente hace muchos años en A Rúa, donde había conocido a su marido, Lorenzo. La madre de la joven aún regenta una cafetería en este municipio ourensano.

"Era una chica alegre, divertida, apasionada de la vida. Le encantaban los encuentros familiares y viajar. Soñaba con ser madre", dijo su primo, Luiz Fernando Pires al mencionado medio chileno. El Faceebok de los jóvenes reflejaba ayer el duelo, en cientos de pésames.