La clausura de la campaña estival se adelantó este año en las piscinas públicas de Oira, a causa de los efectos del temporal de la noche del sábado, que provocaron arrastres de agua y tierra al interior de los vasos de baño y desperfectos en sus sistemas de depuración y drenaje, lo que ha obligado a cerrarlas al público antes de lo previsto.
Fue uno de los daños colaterales de un temporal de agua y granizo, que en el caso del complejo de Oira "provocó daños que todavía tenemos que evaluar, pero que posiblemente afecten a los sistemas de drenaje, y hacían imposible el baño en el recinto por higiene y seguridad, por eso hemos decidido cerrarlas, aunque todavía sigue abierto hasta el día 16 el complejo y piscinas de Monterrei", afirma el concejal de Deportes de Ourense, Mario Guede.
"Un año magnífico"
El cierre de las piscinas de Oira se produce casi tres meses después de su apertura estival, antes de la cual el complejo, de uso gratuito fue remodelado íntegramente, y después de vivir verano "magnífico en cuanto a la afluencia de público, pues en los días de pico de calor se cubrió el aforo máximo de 2.000 personas que tiene ese recinto", indica el concejal.
El Consello Municipal de Deportes informaba al público ayer en su web que desde la tarde del sábado "permancerán cerradas las piscina de Oira, pues la tormenta sufrida en la ciudad originó diversas averías en los equipamientos de bombeo y depuración".
Es el final apurado a una temporada en la que, según el concejal de Deportes, "terminamos el verano con el recinto en bastante buen estado, pues no se habían producido hasta ahora, como en otras ocasiones, importantes daños y el césped estaba intacto".
El área de Deportes había hecho una inversión en Oira en el invierno de 30.000 euros para ponerlas a punto. Las instalaciones ofrecen 1.500 metros cuadrados de lámina de agua en sus diferentes piscinas y en el vaso grande se habían acondicionado precisamente hace tres meses las tuberías de difusión y de depuración, bombeo e instalaciones complementarias.
Desde el 9 de junio abrieron de 11 a 21 horas, de forma ininterrumpida, pero "ya es improbable que podamos reabrirlas pues los convenios para contratación de socorristas rematan ya", indica el concejal y no pueden funcionar sin vigilancia". El próximo chapuzón tendrá que esperar.
