El IES Carlos Casares de Viana do Bolo ha sido premiado con la Placa Universal de la Paz y la No Violencia, otorgado por las fundaciones Humanizar la Tierra y Mundo sin Guerras y sin Violencia, junto con el Centro Cultural y Educativo Español Reyes Católicos de Bogotá, dependiente de la Embajada de España en Colombia, por una acción conjunta de ambos centros.

El distintivo, que se entrega a instituciones a nivel mundial que se caracterizan por su constante actividad a favor del ideal supremo de la paz, ha reconocido la labor de la Escuela de Mediación Xesús Rodríguez Jares, cuyo cometido es la formación de jóvenes y docentes para la resolución pacífica de sus conflictos en países como Costa Rica, México, Ecuador o Colombia.

Esta acción, impulsada en 2012 por el anterior rector del Centro de Estudios Reyes Católicos y exdirector del IES Carlos Casares, Luis Fernández López, ha contado con la participación permanente del instituto gallego a través de su director, Carlos Ferreiro; su vicedirector, Ovidio Villar; y su secretaria y catedrática de Filosofía, Susana Fernández, quienes han impartido formación en Colombia a grupos complejos, como jóvenes excombatientes de la guerrilla, durante los años 2015, 2016 y 2017.

El vicedirector del centro, Ovidio Villar, ha asegurado que la noticia del galardón "es una sorpresa superagradable y es un reconocimiento no solo a la labor de IES Carlos Casares", reconocido en 2006 con el Premio Nacional de Buenas Prácticas de Convivencia por el Gobierno de España, "sino también de muchas más instituciones y de muchísimas personas".

En esta misma línea, ha puesto en valor la necesidad de "acceder al trabajo en convivencia a través de la mediación escolar" para que los colectivos que participan en esta iniciativa "puedan gestionar pacíficamente los conflictos que se desarrollan en su entorno"

En este sentido, ha destacado que Colombia, país al que ha ido a impartir clases, lo enamoró "por la calidez con la que la gente te recibe, te acoge y te quiere" y le enseñó que "todas las personas son iguales en todos los sitios a pesar de los conflictos", por lo que anima a que más centros se sumen a iniciativas de este tipo, puesto que "son fundamentales y es importante creer en la convivencia".