Se muestra "muy pesimista" sobre la posibilidad de sacar adelante cuestiones relevantes para la ciudad de Ourense, en los nueve meses que restan de mandato, con el apoyo de los grupos de la oposición. "Si en tres años y tres meses el grupo de gobierno municipal no fue capaz de aprobar los presupuestos, ni el Plan Xeral de Ordenación Municipal, ni la Relación de Puestos de Trabajo, ni ha podido ejecutar dignamente el Plan de Obras, poco podemos esperar", lamenta.
-Realiza una lectura muy negativa.
-La sensación de bloqueo del Concello de Ourense es generalizada. La paralización es transversal: afecta a todas las concejalías. Va desde la Concejalía de Hacienda, que se muestra incapaz de sacar adelante los presupuestos; a la de Personal, incapaz de impulsar la Relación de Puestos de Trabajo; a la de Cultura. Tras la consolidación, este año no se va a celebrar por primera vez el Festival Internacional de Cine, el Outono Fotográfico y los libreros no han salido a la calle el Día das Letras Galegas por primera vez en 25 años.
-¿Qué pasa con la oposición?
-El gobierno es incapaz de gestionar, pero lamentablemente frente al PP no hay una oposición fuerte, que pueda obligar al gobierno a hacer algo. Esto ocurre porque frente al PP no hay una suma suficiente de progreso. Democracia Ourensana es el partido que ha conseguido mayor respaldo de la oposición, pero ha demostrado que no tiene capacidad de diálogo de ningún tipo. Esa es la razón por la que las fuerzas que permanecen en la oposición no están gobernando, a pesar de que suman un mayor número de escaños.
-¿Qué imposibilita el relevo?
-No se trata de cambiar sillas, se trata de cambiar políticas... Si uno deja al margen el personaje de Pérez Jácome, que grita y hace espectáculos televisivos, llega a la conclusión de que defiende políticas similares a las del PP. ¿Con quién ha llegado a acuerdos en PP en los últimos tres años? ¿Con quién reformó el IBI? Con Democracia Ourensana. ¿A quién beneficia esa reforma? Pues, a las rentas más altas y a los promotores inmobiliarios. Contrariamente a lo que ocurre en Madrid, en Ourense no hay una suma de progreso que pueda desbancar al gobierno del PP. En Madrid se ha logrado una suma de progreso. Hay mucho que aprender, por supuesto, pero por lo menos ha entrado aire fresco en la habitación. En el Concello de Ourense no es posible, porque la figura que podía representar a Ciudadanos, que es Democracia Ourensana, hace que la suma de las derechas en este Concello sea la mayoritaria. Por lo tanto, no hay posibilidades de un gobierno progresista.
-Pérez Jácome capta parte del voto del descontento social.
-Claro, porque cualquier persona que no encuentra trabajo o que lo tiene pero no llega a final de mes, pone la televisión al llegar a casa y ve a un señor que insulta y dice tacos. A veces tiene razón en lo que dice, pero eso no deja de ser una cortina de humo, porque cuando profundizas llegas a la conclusión de que la ideología de Democracia Ourensana es muy próxima a la del PP. Está en contra de la remunicipalización de servicios públicos, está a favor de la introducción de los mercados en la gestión pública, está en contra de la renta básica; solo tenemos que ver cuál es su referente ideológico. Pérez Jácome tiene como referente ideológico a Donald Trump, un hombre que ha puesto el mundo de patas arriba. Jácome empatiza con el voto del descontento, pero yo tengo la esperanza de que en el año 2019 no tenga ese respaldo.
-¿Teme que se pueda repetir el mismo dibujo de ingobernabilidad en las próximas elecciones? Hay encuestas que apuntan en esa dirección.
-Las encuestas hay que tomarlas con mucha precaución. Todavía quedan nueve meses. Yo creo que se van a formar dos bloques, dos alternativas: o hay una suma de progreso, o las formaciones conservadoras, el PP, Democracia Ourensana y Ciudadanos, podrán gobernar el Concello de Ourense. Sería imposible un pacto de izquierdas con el Trump ourensano, Pérez Jácome. Los aliados naturales de Gonzalo Pérez Jácome son Ciudadanos y el PP. En el caso de que sumen entre los tres partidos, gobernará la derecha, por eso es tan importante que un bloque de izquierdas progresista pueda llevar adelante otras políticas.
