Llevaba diez años retirado tras dedicarse a la venta ambulante en las ferias, sobre todo en el sur de la provincia. En un galpón de las afueras de Ourense, en Vilar das Tres, guardaba -por miles- toda una colección de petardos, tracas y otros elementos pirotécnicos: 2.424 unidades de "Truenos", 144 cajas de granadas de humo blanco, 35 unidades de tracas sueltas, 4 cajas de 12 estuches de misiles, 22 cajas de granadas, 167 cajas de 10 unidades de "Truenos Siempre", 18 unidades de "Tubo Águila", 11 cajas de 144 unidades de "Voladores", 32 cajas de 36 unidades de "Correcamas" y 7 kilogramos de petardos de tipo traca, embalados en cajas de 20 unidades.

La Policía retiró el material peligroso después de que se registraran explosiones. Allí llevaban los efectos requisados desde que el dueño, un vendedor ambulante ya retirado, de 60 años, dejó la actividad en el año 2008. El dueño del galpón dijo que almacenaba varias cajas de petardos de distintas clases y categorías de la época en la todavía que se dedicaba a su venta. Fuera del negocio desde hace un decenio, a día de hoy no contaba con permiso o autorización para el almacenamiento de este tipo de material, por lo que queda investigado por un presunto delito de tenencia de explosivos. No fue detenido y carece de antecedentes.

Acudieron los Tedax

El almacén ilegal de material explosivo se descubrió la madrugada del 8 de agosto, cuando varias deflagraciones alertaron a los vecinos, que dieron la voz de alarma al 091 de la comisaría. Agentes del servicio de Atención al Ciudadano de la Policía Nacional detectaron un fuerte olor a pólvora quemada y encontraron en el lugar de las explosiones, en una finca, a un hombre con una manguera doméstica que intentaba sofocar el fuego generado. El señor que prestó ayuda en esa primera colaboración dijo que había avisado al propietario.

Los agentes de Policía personados en el lugar del suceso iniciaron el protocolo de actuación, acordonando la zona como medida de seguridad y comunicando el hallazgo al Grupo de Desactivación de Explosivos de la Brigada Local de Información de Vigo, los Tedax, que se desplazaron a Ourense para analizar el material pirotécnico y proceder a su retirada con seguridad.

También fue informada la Brigada Provincial de Policía Científica de la comisaría, que llevó a cabo la inspección ocular en el lugar de la explosión. De la extinción completa del incendio se encargaron los bomberos del parque municipal.

Según la Policía Nacional, el incidente que permitió descubrir el almacén ilegal se debió al sobrecalentamiento del compresor de un arcón frigorífico, situado justo al lado del material pirotécnico, que estalló.

La Policía pide concienciación

La comisaría continúa con las gestiones para averiguar la procedencia y fin de los efectos hallados. Se ocupa la Brigada de Información, que es la encargada de la gestión de la incautación y retirada de los efectos nocivos, explosivos o similares. La Policía Nacional pide máxima concienciación a la ciudadanía por el peligro que entraña el almacenamiento de material explosivo sin permisos ni las condiciones adecuadas de seguridad.