El Ayuntamiento de Castro Caldelas ingresaba oficialmente en la Asociación de los Pueblos más Bonitos de España el día 30 de diciembre del pasado año. Desde entonces, la villa, que ya era el segundo lugar más visitado de la provincia de Ourense (después de la catedral), se beneficia de pertenecer a esta prestigiosa lista de destinos españoles.
La villa, que se sitúa en el Macizo Central ourensano, impera en una de las colinas de la ribera del río Edo. Además, Castro Caldelas siempre ha gozado de un casco histórico y una fortaleza que revelan el resplandor de su época medieval.
Entre los cuarenta requisitos exigidos para pasar a ser parte de la guía de pueblos más bonitos del país estaban el poseer un casco histórico, un monumento nacional y un bien de interés cultural declarado por la UNESCO. Premisas que la villa septentrional consumaba desde el inicio de las auditorías.
Como indicaba la alcaldesa Sara Inés Vega, "nos resultó muy sencillo satisfacer estas condiciones. Todo el entramado histórico de Castro Caldelas, junto con la zona de la carballeira, contaban ya con la testificación de la UNESCO. Del mismo modo que el castillo había sido proclamado monumento nacional".
Sin embargo, la alcaldesa subrayaba la existencia de otros requisitos que resultaron más complicados de alcanzar. "La Asociación de los Pueblos más bonitos de España también exige una regulación del tráfico, una buena limpieza, una construcción urbanística armónica y, sobre todo, una gran satisfacción turística", indica.
No obstante, los visitantes siempre se muestran contentos tras su viaje a la villa. Igualmente que los inspectores entendieron desde el inicio del proceso que los resultados serían positivos.
Incremento turístico
Por otro lado, la entrada del pueblo en la red de los destinos más ambiciosos de España ha dado una serie de frutos de los que gozan actualmente, tanto los vecinos como los comercios y el ayuntamiento. Asimismo, la alcaldesa destacaba que "hemos llevado un recuento turístico desde el 1 de enero hasta el 15 de junio. Entre estas dos fechas, la afluencia de entradas al castillo ha aumentado un 18%, puesto que este monumento era uno de los más visitados de toda la provincia, y dicha subida turística de casi un 20% es todo un logro".
A pesar de ello, Sara Inés Vega destacaba la importancia de unas buenas políticas para salvaguardar el nivel cultural y la manutención de la villa.
Con motivo de lo anterior, la alcaldesa apuntaba que "desde hace medio año los visitantes nos comentan que nos encuentran a través de la guía. También suelen resaltar su entusiasmo por el paisaje y la zona".
Nuevos proyectos
Por otra parte, la afluencia turística ha derivado en la apertura de nuevas empresas dedicadas al sector turismo. Estas ofertarán servicios de guía por el castillo, el casco histórico y sus alrededores.
En la misma línea, cuatro residencias vacacionales acogerán a los visitantes que pernocten en la villa. Del mismo modo, se han iniciado proyectos de mayor envergadura que por el momento se encuentran en fase de desarrollo.
Vega explicaba que "el hecho de entrar en esta red no implica actuaciones instantáneas. Sin embargo, se están emprendiendo nuevos proyectos derivados de la riqueza que nos aporta el turismo. Todo influye para mantener este nivel de visitas tan destacable, tanto haber pasado a formar parte de la Asociación de Pueblos más Bonitos de España como el nivel cultural y turístico que el ayuntamiento está imprimiendo"
