Empanada de ortigas, arroz con ortigas, ortigas en potaje, licor de ortigas, y otras múltiples maneras de degustar esta planta silvestre que abunda en los montes gallegos, pica y causa urticaria en contacto con la piel, pero no tras ser cocinada. Es suave, refrescante y con un aroma de menta, con propiedades parecidas a las de la espinaca, con vitaminas B-2 o C, proteínas o minerales como, hierro, magnesio, potasio o calcio, con el añadido de que este último no se pierde en la cocción. Ciento treinta y dos comensales de distintas partes de Galicia y Portugal participaron ayer en el claustro barroco del Monasterio de San Rosendo, en Celanova, en una jornada que acercó a paladares de todas las edades una especie "injustamente denostada", subraya Martín Álvarez, presidente de la asociación cultural As Ortigas, que organizó el evento.

Antes de sentarse a comer, se celebraron unas jornadas técnicas, con la intervención de distintos expertos sobre el aprovechamiento de esta planta. La ingeniera agrónoma Susana Gulín habló sobre el uso de la ortiga, en la agricultura ecológica, como alternativa a los purines industriales. El farmacéutico José María Torres abordó la presencia de la planta como símbolo en varios escudos, como el de Ortigueira, el de la provincia de Almería o el de Vélez-Málaga. Hubo además una ponencia y una mesa redonda sobre el valor de esta planta silvestre para conservas y productos gourmet. Después de la comida, los participantes hicieron un paseo cultural por la villa de Celanova. La jornada de exaltación de la ortiga finalizó apelando al paladar de nuevo, a base de pinchos. El plato que más gustó a los comensales de Celanova -era la primera vez que acogía este evento gastronómico- fue el revuelto de ortigas y setas.

Martín Álvarez, natural de la localidad y autor del libro "45 Recetas con Ortigas", reivindica las propiedades de una especie que forma parte de la heráldica de varias localidades, que se relacionó con las brujas pero que también aparece mencionada en la biblia, y que en el Manual de Supervivencia del Centro de Operaciones Especiales se recomienda a los soldados como una fuente de alimento en situaciones de emergencia.

"No está aprovechada" pese a sus beneficios nutritivos y también para la salud, subraya el presidente de la asociación que exalta la ortiga. Es una planta diurética y drenante, dice el experto -para rebajar la comida, además de licor se sirvieron infusiones de ortigas y otras hierbas-. Además es una alternativa a los productos fitosanitarios industriales, que no contamina, "y adecuada en champú para combatir la caspa y cuidar el pelo".