La demografía provincial vuelve a sufrir una nueva sacudida, al perder casi 2.200 habitantes en el último año hasta quedar, según los datos definitivos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), de 1 enero de 2018 en los 309.371 censados, lo que supone un mínimo histórico para una provincia que llegó a superar mucho después del éxodo migratorio de la primera mitad del siglo XX, es decir hace solo 50 años, los 440.000 habitantes.

Pero además parte más del 60% de esos 2.190 habitantes que ha perdido la provincia, en el lapso comprendido entre el 1 de enero de 2017 y el 1 de enero de 2018, afectan a las franjas de población más joven, es decir las que van desde los 16 a los 39 años, que son las que concentran el grueso de la población activa o en edad laboral de la provincia.

Pérdida en 10 años

En términos globales, la sangría demográfica de la provincia, ha supuesto la pérdida, cotejando los datos publicados ayer por el INE, con los de hace solo una década de 33.433 habitantes, es decir una media de 3.300 habitantes menos, cada años desde 2008, lo que supone que en la última década la provincia perdió una media de 9 vecinos al día.

Por franjas generacionales, Ourense, con esa media de edad de 51 años en el ámbito poblacional, que supera los 62 en varios concellos de la provincia, cuenta ya con 228 habitantes que superan los 100 años, pero ha tenido sus principales sacudidas, en los últimos 12 meses entre los jóvenes de 20 a 24 años y los 25 y 29 cuya caída supera los 600 habitantes menos en total y también en la franja de 30 a 34 años donde se han perdido también 325 habitantes.

Ademas es el estudio detallado por décadas el que demuestra que la caída ha aumentado a partir del año 1971. En ese momento la provincia de Ourense tenía una población de 441.256 habitantes, un "caramelo" demográfico, que en 1978, estaba ya en los 432.182 habitantes,

A partir de ahí se genera un segundo éxodo migratorio en la provincia, de modo que en solo 10 años, los que van de la década de 1978 a la de 1988. Ourense perdió la friolera de 57.337 habitantes, pasando de los mencionados 432.182, a los 375.845 vecinos.

Lejos de solucionarse y equilibrarse la balanza, la caída, ya de una forma más mesurada siguió imparable hasta ahora. En 1998 , Ourense perdía otros 32.064 habitantes al caer en dos lustros hasta los 344.868 vecinos.

Nuevamente esa tónica de los 3.300 vecinos menos al año, continuó de modo que en el año 2008, la provincia vuelve a sufrir otro retroceso y baja hasta los 332.814 habitantes

Así hasta llegar a este 1 de enero de 2018, en el que esa pérdida poblacional que sitúa Ourense en los 309.371 habitantes, cifra sin parangón en el último medio siglo, se materializó en solo seis meses. De hecho en enero de 2017, había aún 311.561 habitantes en Ourense, y seis meses después, en julio del pasado año, ya había bajado hasta los 309.923.

Este es según los expertos en demografía una secuencia habitual pues esa marcha migratoria se produce muchas a principio de año, como una forma de buscar nuevas salidas en un contexto laboral o de estudios que no cumple objetivos en la ciudad de origen.