El mítico Abrazo ao río Limia, en su 8ª edición, tuvo lugar ayer en Xinzo con la llegada a la Plaza Carlos Casares de los niños de los colegios de Ponte de Lima, donde ya los esperaban los alumnos de 4º de los CEIP locales. Un total de 200 escolares. Una iniciativa que contó con el cónsul de Portugal en Galicia quien quiso apoyar este acto simbólico del hermanamiento de la Cámara de Ponte da Lima y el Concello de Xinzo.

Sonaron gaitas, panderetas y tambores de la Banda da Escola Municipal de Gaitas e Percusión, para recibir a los compañeros de Ponte de Lima. Ya dentro de la Casa de Cultura, el cónsul, el Vareador de Cultura de Ponte da Lima, el alcalde de Xinzo y el edil de Deportes, Educación e Xuventude, Luís M. Gil, dirigieron unas palabras de compañerismo y hermanamiento acompañados de otros miembros de la corporación municipal y los directores de los centros educativos, apoyados en esa causa común, que es el amor al Río Limia.

Tras este acto, todos caminaron al puente peatonal del río donde comenzaron a rodear la zona dados de la mano, hasta conseguir ese simbólico abrazo al río, y escuchar una lectura de Delfín Caseiro.

Y la lluvia no impidió que se plantara un árbol de ginkgo biloba como símbolo de fraternidad y de vida, que es lo que genera el río a su alrededor, y se descubrió una placa conmemorativa.Después de comer los alumnos portugueses pudieron visitar el Museo Galego do Entroido y junto con los niños limiás fueron al naciente del río, en la zona de Paradiña, y terminaron visitando el Festival de Xardíns de Allariz