La desconexión del ILS para modernizar su funcionamiento dejó el martes a 4.000 pasajeros afectados, que se suman a los que ya padecieron desvíos y cancelaciones desde principios de mayo, cuando se adoptó la medida. En total el número de perjudicados ronda los 12.000 y el de vuelos alcanza ya el centenar. ¿Pueden reclamar los afectados? ¿Qué vías tienen a su alcance? A continuación se dan algunas claves.

| Conservar el billete. Desde la Asociación de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios Rías Baixas, María Álvarez recomienda conservar la documentación y la tarjeta de embarque, un material importante para poder presentar una reclamación. También aconseja ser lo más claro posible al cursarla, detallando día, hora, la demora o cancelación... En el caso de que el mostrador de la compañía esté cerrado, aconseja dirigirse al de Aena o incluso realizar la reclamación por Internet.

| Retrasos de tres horas. Álvarez explica que para reclamar por un retraso este tiene que superar las tres horas. En el caso de que se excedan las cinco, asegura incluso que se podría considerar una cancelación del servicio.

| Vuelo cancelado. La OCU recuerda que si el vuelo se cancela la aerolínea tiene que ofrecer una solución al viajero, que puede consistir bien en el reembolso del billete o bien en cambiarlo para tener acceso a un nuevo viaje. La devolución del billete deberá abonarse en siete días. Ante una cancelación la compañía debe cubrir además los gastos de manutención, alojamiento e incluso llamadas telefónicas, por eso deben conservarse los recibos.

| Compensaciones. En cuanto a las indemnizaciones, hay una serie de circunstancias en las que la aerolínea está exenta: si se cancela por una "circunstancia excepcional" o se ha avisado con suficiente antelación. Las compensaciones dependen en gran medida de la distancia que cubriera el vuelo. Por ejemplo, para menos de 1.500 km se estiman 25 euros.