Un hombre de 50 años fue juzgado ayer en Ourense como presunto autor de un delito de malos tratos habituales que no reconoce. Presuntamente, agredió de manera habitual a su expareja y, una vez finalizada la relación, la telefoneó "de manera incesante" y la amenazaba con denunciarla por robo y estafa.

El encausado y la víctima mantuvieron una relación sentimental y convivieron juntos en diversas localidades de España durante varios años, al menos durante 2013 y 2014, según el escrito de calificación de hechos de la Fiscalía. La causa judicial se abrió en Verín en 2015.

Presuntamente, mientras duró la relación, el individuo sometió a malos tratos a la víctima de manera habitual. La Fiscalía sostiene que el encausado la agarraba por el cuello, amenazó con matarla, la cogió por los pelos, le dio bofetones y la tiró encima de la cama. También le retorció un dedo de la mano izquierda, según el relato de lo sucedido que asume la acusación pública. Califica los hechos como un delito de malos tratos habituales en el ámbito familiar. En el juicio celebrado ayer, la fiscal pidió una condena de 2 años de cárcel, la prohibición de que el hombre tenga o porte armas durante 4 años y medio, una orden de alejamiento de 4 años a una distancia mínima de 300 metros más 2.500 euros por daños morales.