La Consellería de Cultura acordó con el Concello de O Carballiño una subvención para la conservación y mejora de las instalaciones, para lo cual destina una partida de 70.000 euros. Una actuación que se produce después de reiteradas quejas que tanto usuarios como los grupos de la oposición, entre ellos el PP, reivindicaran en reiteradas ocasiones debido al estado de abandono y las deficiencias de estas instalaciones.

La Xunta tomó este acuerdo luego de enviar unos técnicos para verificar y analizar el estado de la biblioteca, y de que en los últimos tres años se perdieran varias líneas de inversión por parte del Concello de O Carballiño y más concretamente por parte de la concejalía de Cultura.

Tras confirmarse esta aportación, el grupo municipal del PP solicita que ahora el ayuntamiento habilite una partida presupuestaria a mayores de la subvención de la Xunta para subsanar y adecuar no solo las instalaciones sino también para poder contar con los medios técnicos necesarios y con personal cualificado para atender a los usuarios, así como permitir promover el usa de las instalaciones.

Apunta que ambas inversiones "urgentes y necesarios" permitirán atender y reactivar unas dependencias que dan un servicio básico a los vecinos "propio de un Concello de más de 10.000 habitantes y de sus competencias".

Este grupo de la oposición recuerda que esta inversión fundamental dado el estado actual no descarta el consenso y acuerdo tomado en el pleno municipal de la necesidad en un futuro de ir pensando en buscar nuevas instalaciones para adaptarse a lo que actualmente se considera una biblioteca moderna, funcional y adaptada con un centro de estudio.

Cabe recordar que entre las quejas más frecuentes vertidas por los usuarios de este servicio están el frío en invierno y la mucha calor en verano, los baños estropeados, casi un año sin internet, la ludoteca hace dos años que no funciona, horario de atención insuficiente.

La precaria situación de la biblioteca municipal llevó incluso a que la Asemblea Nacional das Estudantes Galegas, ANEGA, de O Carballiño, convocara en mayo de 2016 una concentración para denunciar el " deficiente" estado.

También cabe destacar que este servicio lleva varios años sin personal adscrito para atender al público de forma profesional, ya que la plaza de bibliotecario está vacante por jubilación de la persona que la gestionó durante años.Una plaza que se prevé dotar y que está contemplada en la Relación de Puestos de Trabajo, RPT, que está pendiente de su aprobación definitiva.