La nieve y el granizo que cayeron copiosamente en varias zonas de montaña de la provincia de Ourense durante la madrugada y buena parte del Viernes Santo causaron incidencias en las carreteras. La más grave ocurrió por la tarde en la OU-540, a la altura del Alto do Vieiro, en el municipio de Verea. Un hombre de 65 años, J. A. M. G., identificado como vecino de Vigo pero oriundo de Santa Comba de Bande según fuentes de la zona, falleció tras patinar con su vehículo al tomar una curva e impactar contra otro. La Guardia Civil de Tráfico investiga las causas, aunque la primera hipótesis apunta a una pérdida de control por el hielo y la gran cantidad de granizo acumulados en ese momento en el asfalto. Este siniestro mortal eleva a cuatro el número de víctimas que se han registrado en las carreteras de la provincia de Ourense desde el 1 de enero de este año.
El siniestro ocurrió a las 19.45 de anteayer a la altura del kilómetro 35,5 de la OU-540, en el término municipal de Verea. La víctima conducía un Mercedes modelo C-220 en sentido Ourense, en compañía de un familiar que resultó herido leve con un golpe en la cabeza consecuencia de la colisión, según información de Tráfico. En una curva, el vehículo patinó, invadió el carril contrario y chocó frontolateralmente contra una Nissan Pickup que avanzaba en sentido opuesto.
Excarcelación
Como consecuencia de la colisión entre los dos vehículos, las víctimas del Mercedes quedaron atrapadas en el interior, por lo que tuvieron que intervenir los bomberos de Celanova con un equipo de excarcelación. Los profesionales rescataron a las dos personas.
Los efectivos sanitarios no pudieron hacer nada por el conductor, que perdió la vida debido a que la fuerza del impacto se concentró en su habitáculo. Además, en el operativo también participaron miembros del Grupo de Emergencias Supramunicipal (GES) de Muíños así como agentes de la Guardia Civil de Tráfico. El instituto armado informó del fallecimiento al juzgado de guardia de Bande y al médico forense.
El fallecimiento registrado este Viernes Santo en la OU-540 sitúa el número de víctimas mortales en siniestros de tráfico en un total de 4 personas, en lo que va de año y en carreteras de la provincia.
El primer siniestro fatídico de este 2018 en Ourense ocurrió el 7 de enero en A Merca. I. O., un hombre de nacionalidad rumana y 30 años, murió al caer con su furgoneta desde unos 3 metros de altura, cuando circulaba a las 22.15 horas de la noche por la carretera OU-0202, que conecta la población de A Merca -donde ocurrió el suceso- con la de Rante (San Cibrao das Viñas). Según Tráfico, el conductor no llevaba puesto el cinturón.
Un hombre de 62 años, J. L. G., vecino de Negrelle, en el municipio de Maside, fue la segunda víctima en carretera de 2018 en la provincia. Falleció la noche del 13 de febrero al caer con su furgoneta por un terraplén, desde una altura de unos 3 metros, tras salirse de la calzada por el margen derecho en la carretera que une el polígono de A Uceira con la carretera N-541, cerca de Dacón. Entre las hipótesis se barajó una posible distracción.
El 8 de marzo, un camionero de 43 años y vecino de Ourense, J. L. Y. P., falleció atropellado en la autovía A-52, a la altura de Mesón de Erosa, en A Gudiña, mientras intentaba sofocar un incendio declarado en una rueda de la parte trasera de su camión portavehículos. Fue arrollado mientras atacaba las llamas con un extintor desde la calzada. El fuego declarado en el remolque del camión se terminó propagando a varios automóviles, que resultaron calcinados.
El año pasado, 9 fallecidos
Las 4 muertes en siniestros viales registrados en la provincia en los tres primeros meses del año suponen ya casi la mitad del total de víctimas que fallecieron en todo 2017. El año pasado, en Ourense perdieron la vida un total de nueve personas en accidentes de circulación, tanto en siniestros registrados en carreteras como en zona urbana, con dos atropellos mortales en la ciudad. Entre las víctimas mortales de 2017, una menor de 17 años que murió en un accidente de un quad, ocurrido en Xunqueira de Espadanedo, así como un bebé que falleció con solo 40 días tras una colisión entre dos vehículos en la N-120 O Barco de Valdeorras.
