Adif Alta Velocidad iniciará el próximo lunes 9 de abril, si la climatología lo permite, los trabajos urgentes de reparación de carreteras de titularidad municipal, afectadas por las obras de construcción de la Línea de Alta Velocidad (LAV) Madrid-Galicia en la provincia de Ourense.
Las reparaciones afectan a un total de 18 carreteras distribuidas entre los concellos de Xunqueira de Ambía, Vilar de Barrio, Castrelo do Val, Laza, Taboadela, Paderne de Allariz, Allariz y Baños de Molgas.
Las actuaciones, que se anuncian con carácter urgente, comprenden el recargo y reposición de firmes mediante tratamientos superficiales y aglomerado, reparación de bacheos, restauración de mordientes y regularización de blandones, con una inversión prevista de 2.330.146 euros, IVA incluido.
El objetivo del proyecto es la rehabilitación y mejora provisional del firme de estas 18 carreteras, de titularidad municipal, durante el tiempo que se prolonguen las obras de la LAV Madrid-Galicia, con el fin de aumentar la durabilidad de sus firmes y mejorar las condiciones de circulación y seguridad vial. El plazo de ejecución de los trabajos es de 12 meses.
Diez viales
Por otra parte, Adif sigue actuando en 10 carreteras tanto de titularidad autonómica como de la Diputación provincial, en virtud del contrato de reparaciones urgentes de carreteras autonómicas y provinciales, adjudicado en diciembre de 2016 por casi 5,2 millones de euros.
Según explica Adif, la ubicación de las obras de la LAV Madrid-Galicia entre los tramos de Vilariño de Conso y Taboadela, en pleno macizo central gallego y muy distantes de los principales núcleos de población, hacen que el acceso a los trabajos tenga que realizarse por una amplia red de carreteras secundarias, dimensionadas para tráficos muy reducidos. Normalmente se trata de carreteras muy estrechas y poco adecuadas para el tránsito de maquinaria.
Sin rutas alternativas
La Administradora de Infraestructuras Ferroviarias reconoce que con el avance de los trabajos en la línea de alta velocidad y el consiguiente tráfico de vehículos pesados, estos viales han acabado presentando daños como blandones, baches, 'piel de cocodrilo', mordientes y hundimientos, entre otros. Asimismo, se da la circunstancia añadida de que el acceso a determinados núcleos de población solamente es posible por un único vial, lo que imposibilita rutas alternativas para la maquinaria.
Los destrozos provocados por estas obras que se prolongan en el tiempo ha provocado numerosas protestas a las que se sumaron algunos alcaldes y también iniciativas políticas demandando a la promotora de la obra, en este caso Adif, la reparación de los viales dado que, como la propia administradora admite, son los mismos que utilizan los vecinos y los únicos accesos a numerosas poblaciones.
