El proyecto ambiental del que se hablaba en aquel lejano 2003, era ambicioso y se daba incluso ya poco tiempo después el nombre del especialista que se encargaría de la puesta en funcionamiento del mismo, Antonio Estévez, un funcionario de la Diputación y naturista conocido por sus profundos conocimientos en la materia, con proyectos similares que había defendido durante décadas en las administraciones, y que iba a convertir As Madornas como declaró entonces en un espacio "vivo" en de recuperación incluso de especies amenazadas, tanto aves como anfibios, tritones, y el galápago europeo, como los que, en la foto contigua lleva en su mano.

Pero todo quedó ahí y a lo largo de los años no llegó a contar con el apoyo decidido de las administraciones. No se rindió y Antonio Estévez era noticia años después en toda España por capitanear un proyecto similar sin ánimo de lucro en una finca de 10.000 metros, que tuvo que financiar con sus propios recursos, el Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (C.R.E.A) Félix Rodríguez de la Fuente. Un proyecto que define como pequeño "parque natural" en el que especies diversas en especial de anfibios y plantas

Este infatigable especialista salía de nuevo a la luz el pasado mes cuando donó al espacio natural de O Rexo en Allariz, una " "Marsilea Quadrifolia'", una especie de trébol acuático que solo en su centro CREA CREA que Estévez gestiona en la provincia de Ourense y en el delta del Ebro.