La celebración de San Roque, es un día especial para la Policía Local por ser su patrón, pero en está ocasión han sido unas fiestas marcadas por la polémica. Así, el alcalde, Jesús Vázquez, que presidía los actos, cargó contra el Sindicato Profesional de Policías Municipais de España (SPPME), después de denunciar que durante el pasado fin de semana no hubo patrulla de atestados.
Una cuestión que negaba el regidor, en función "de lo que me trasladan los cargos policiales, eso no es cierto". Y asegura que ese sindicato -por el SPPME- "está siguiendo un camino equivocado, que es el de difamar" a algún miembro del gobierno, en alusión a que calificaban de "pasotismo" del concejal de Seguridad, Policía Local y Bomberos, Carlos Campos.
Para Jesús Vázquez esa no es la solución a los problemas que tiene la Policía Local, sobre todo en lo que se refiere a las importantes limitaciones de plantilla, que según las estimaciones que se realizan se necesitarían entre 30 y 40 agentes más. Y advierte que "no todo está permitido", por lo que anuncia que "adoptaremos las decisiones oportunas", en alusión a "los deberes y obligaciones que tienen".
La reacción a las manifestaciones del alcalde por parte de la oposición no se hicieron esperar, y el portavoz de Democracia Ourensana, Gonzalo Pérez Jácome las calificó de "muy graves", en alusión a la "difamación" por parte de los representantes del sindicato hacia un miembro del gobierno. Además de indicar que "debería ir al juzgado", advierte que se tratan de problemas que se vienen prolongando en el tiempo sin que por parte del gobierno se resuelva, más allá de seguir con este tipo de enfrentamientos.
Pero lo que critica Jácome es que el alcalde interrumpa las vacaciones para "hacerse las fotos" presidiendo la procesión, y no así para otras cuestiones que tiene mayor relevancia para el devenir del concello. "Es patético", asegura el portavoz de DO, que dice "no me sorprende nada de este alcalde".
Medidas y amenazas
Por su parte, el portavoz del grupo socialista, José Ángel Vázquez Barquero, dice no salir de su asombro con las manifestaciones del regidor, al que recuerda el derecho constitucional que existe para la acción sindical, que es la que está ejerciendo ese y otros sindicatos con representación en el concello.
Pero lo que a Barquero le parece una "osadía" por parte de Jesús Vázquez es asegurar que ese sindicato en cuestión "sigue un camino equivocado", cuando a lo mejor es "él que está equivocado y no quiere reconocerlo". En cuanto a que se adoptarán medidas por calificar de "pasotismo" al edil de Seguridad, la entiende como "una clara amenaza", lo cual, para Vázquez Barquero "es mucho más preocupante, ya que demuestra el talante real que tiene el alcalde".
De ahí que se reclame "respeto", pero sobre todo, que se resuelvan los problemas que tiene la Policía Local por tratarse de un servicio municipal que tiene una especial relevancia para la seguridad de la ciudadanía.
Diálogo
Las duras y contundentes acusaciones del alcalde también tuvieron respuesta por parte del SPPME, que se mantienen en su denuncia relacionada con la ausencia de patrullas de atestados. Y señala que el viernes a la tarde no había patrulla especializada de atestados, ya que "había un policía y un policía en prácticas, pero no había especialistas". Así como que el sábado y domingo de noche "no hubo, y solo había dos patrullas".
Y en respuesta al regidor, advierte que "nos quiere hacer pasar por tontos y ciegos", en referencia a que los delegados y afiliados del sindicato "trabajamos allí y vemos lo que esta y lo que no". Abundando en los datos, recuerdan al alcalde y al concejal de Seguridad que "saben perfectamente que desde la jefatura les mintieron en varias ocasiones, y esta es una más", en alusión a los que le trasladaron para asegurar que no eran ciertas esas denuncias que formularon.
También se avisa por parte del sindicato policial que "estaban advertidos de que el nuevo cuadrante de turnos no funcionaría y estos son los resultados". Lo que les lleva a reprochar al alcalde que "se lave las manos" en el tema de la Policía Local, cuando sabe que existe un problema grave".
Por parte del SPPME se asegura que "estamos dando un servicio deficiente" a la ciudadanía, de lo que responsabilizan a "los caprichos" de la jefa del cuerpo, María Barrera, ya que "pone por encima el interés de castigar a los delegados y afiliados del sindicato que el de todos los ciudadanos, y con el consentimiento del alcalde".
Con un conflicto abierto, como el que existe en estos momentos, desde el sindicato policial se hace un llamamiento al diálogo y "no a amenazas", así como a la "apertura de expedientes con informes tendenciosos como se está haciendo", y algunos de los cuales pueden derivar en la vía judicial, después de haber dado traslado por escrito al comité de saludad del Concello, relacionados con presunto acoso laboral y coacciones.
Por lo de pronto no hubo ningún tipo de acercamiento, y esa conflictividad a la merma de efectivos con los que cuenta en la actualidad la Policía Local.
