Poco después de las 14.30 horas de la tarde, una de las hijas del matrimonio Vázquez Raña llegaba a la mansión familiar en Avión en un todoterreno azul marino. Tocó al interfono y pidió ayuda al servicio para introducir sendas cajas, envueltas en papel verde y rojo, a las que se refirió como "los regalos de papá y mamá".

La saga al completo, incluidos hijos e hijas, yernos y nueras, nietos, nietas y bisnietos comparten el verano con los patriarcas, una familia "bien llanita, cercana y sencilla" según los vecinos que veranean en la localidad ourensana desde hace más de 30 años.