El alcalde de Xunqueira de Ambía y dueño de Empresa Gavilanes S.L. se mostró ayer "tranquilísimo" respecto a esta investigación que le afecta en el ámbito empresarial y no por su cargo público. Asegura que "nunca" tuvo empleados en situación irregular, que en su empresa hay varios extranjeros trabajando pero que "pueden hablar y dirán si estuvieron algún día sin estar dados de alta". Apunta que "no es la práctica, ni tengo necesidad ni es mi estilo", y que en este particular "puedo dar lecciones a cualquiera".

Respecto a la relación con los trabajadores inmigrantes afirma que le preguntaron únicamente por un ciudadano senegalés al que admite conocer pero con el que niega haber mantenido ninguna relación laboral. Señala que ha acudido en alguna ocasión a la nave con su novia para lavar el coche de esta pero que no entra ni ha entrado en sus previsiones contratarle.

Apela a su trayectoria profesional de 40 años en la que "ningún inspector de trabajo encontró un obrero sin dar de alta" por lo que sostiene, en referencia a los policías que le investigan, que "parecen interesados en construir pruebas falsas, pero lo van a tener complicadillo porque donde no hay no se puede sacar".

Señala que su relación con los inmigrantes es de "beneficencia" y reconoce haber ido "al piso que le pagamos en Jesús Soria a llevarles comida un montón de veces", un gesto de caridad, precisa, del que asegura sentirse muy orgulloso.