Continuando con la conmemoración de su 25 aniversario, el Parque Tecnológico de Galicia, ubicado en el polígono de San Cibrao das Viñas, acogió ayer la asamblea anual de la Asociación de Parques Científicos y Tecnológicos de España, APTE. Un encuentro en el que los representantes de los 66 parques miembros pusieron en común asuntos relativos a la gestión de la entidad y abordaron las acciones conjuntas a emprender en los próximos meses.
En el encuentro participaron el presidente del colectivo, Felipe Romera, y la directora de la Axencia Galega de Innovación de la Xunta y consejera delegada de la Tecnópole, Patricia Argerey. Esta última destacó la contribución de los parques científicos y tecnológicos al crecimiento económico y puso como ejemplo de esta labor los servicios de apoyo que prestan a las empresas, "avanzados y especializados". Argerey aplaudió también el impulso a iniciativas que, en el caso de la Tecnópole, benefician a todo el tejido empresarial gallego. Un ejemplo, indicó, es el programa Agrobiotech, una aceleradora de innovación de pequeñas y medianas empresas de los sectores agroalimentario, biotecnológico y de la biomasa, en el que participa también la Axencia Galega de Innovación. La segunda edición, ya en marcha, cuenta con la participación de diez empresas gallegas.
Con todo, Patricia Argerey agradeció el acompañamiento de APTE en este cuarto de siglo, en el que Tecnópole acogió dos conferencias internacionales de parques y en el que la asociación española también contribuyó a su evolución y crecimiento. Actualmente, el Parque Tecnolóxico de Galicia acoge cerca de 300 empresas y centros de conocimiento.
Entre los 48 parques socios que conforman actualmente el aparato operativo de la APTE figuran dos gallegos, la Tecnópole y el Parque Tecnolóxico de Vigo, que, según Argerey, "son ejemplo de concentración del talento innovador de Galicia". La directora de la agencia gallega de innovación destacó también que las entidades que forman parte de ambos parques son un "foco de emprendimiento innovador, de conocimiento listo para ser transferido desde los centros tecnológicos y de investigación, y de pymes capaces de ganarse un posicionamiento competitivo en el mercado internacional a través de la innovación".
En cuanto a la entidad nacional, según los datos presentados en la asamblea, los 66 parques miembros de la APTE suman 7.778 empresas y generan un total de 161.343 empleos, de los que 30.269, el 18,7%, son profesionales especializados en tareas de investigación y desarrollo (I+D).
Además de aprobar sus cuentas y abordar cuestiones internas relativas a la gestión, los participantes en la asamblea de la APTE tuvieron la oportunidad de conocer la diversidad científico-tecnológica de la Tecnópole, que incluye desde un nido de empresas en el que cobran vida las ideas de los emprendedores hasta Egatel, la empresa que consiguió la máxima puntuación en el índice Innobench (termómetro de la posición innovadora de las empresas gallegas que puso en marcha hace más de un año la Xunta), o 'start-up' como Xesol Innovación, que presentó hace unos meses un sistema autónomo de asistencia a la conducción y que está valorada en 230 millones de euros.
Finalizada la asamblea, los miembros de la APTE realizaron una visita a dos de las empresas de Tecnópole, Coasa y Egatel. Esta actividad puso fin al programa de dos días que trajo a esta delegación de representantes de parques liderada por la APTE. Durante la primera jornada, además de celebrar una mesa redonda en la que debatieron el futuro de este tipo de entidades, fueron recibidos por el alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, y tuvieron ocasión de disfrutar de las termas de Outariz.
