Claudio G. L., que suma varias condenas por delitos de robo, fue ayer a juicio por partida doble y se conformó con otras dos sentencias. En ambas la pena posible se atenúa porque la Fiscalía admite los graves problemas de adicción a las drogas que sufre el acusado.

En uno de los casos actuó junto a otro hombre, Josué J. D., quien también es reincidente. Ambos se conformaron con una pena de 1 año y 1 meses de prisión por un delito de robo con fuerza en las cosas cometido en la madrugada del 9 de septiembre de 2013.

Los acusados se dirigieron al polígono de A Uceira, en O Carballiño, y violentaron el candado de la entrada a la parcela de una empresa, logrando acceder a la nave. Allí se apoderaron de diverso material metálico, además de un trombón, un cuadro de "La última cena" y un viejo candelabro de cobre.

Claudio aceptó ayer otra pena idéntica, de 1 año y 1 meses -se le aplicó la misma atenuante de grave adicción a las drogas-, por un delito continuado de robo con fuerza en las cosas, cometido unos meses más tarde. El 31 de diciembre de 2013 accedió a un almacén de ferretería en Maside, tras saltar la valle de acceso. Cortó con una rebarbadora tubos de cable de cobre del interior de la nave. El acusado fue sorprendido por un empleado, logrando huir con parte del material.

El 3 de enero de 2014, el acusado accedió a otra empresa por una de las puertas abiertas, donde cargó varios puntales de obra. El dueño lo sorprendió y el ladrón devolvió la totalidad del material. El 6 de enero, el acusado fue detenido por la Guardia Civil cuando llevaba en su furgoneta una caja de cerraduras robada un día antes en una empresa carballinesa.