Ribeiro en Común apoya la construcción de un nuevo campo de hierba artificial en Ribadavia pero ve difícil una solución al cierre del actual, no obstante, demanda una solución negociada. Cree que la actitud del alcalde es de confrontación con las administraciones implicadas.

Apunta que en el pleno de esta semana "se escenificó una vez más que el gobierno local con su alcalde a la cabeza está más preocupado por crear un relato en el que ellos son `víctimas de un agravio´, que de arreglar un problema en el que el Concello tiene buena parte de culpa".

El grupo de gobierno llevó al pleno una moción que "no va a arreglar el problema ni ayudar a que se resuelva, el alcalde redunda en una óptica de litigio y no de pacto y acuerdo con las dos administraciones implicadas en el cierre del campo: Confederación Hidrográfica y Diputación".

Para RenC debe profundizarse en la vía de la negociación pues "está demostrado que el gobierno local de Ribadavia es uno de los culpables de esta situación como promotor de la obra, y por lo tanto lo que debe hacer es llegar a un acuerdo y no buscar un litigio que perpetúe el cierre del campo de hierba sintética".

Su portavoz, Brais Fidalgo, recuerda que en una moción demandó que por parte del Concello se llevara el proceso de Responsabilidad Patrimonial que tenía fecha de caducidad en julio de 2016, siendo un argumento más a favor del Concello para la negociación, no para la confrontación, como así lo volvió a reiterar este jueves en el pleno.

Destaca que la Plataforma "Campo de Herba Artificial Xa" y algunos clubes y usuarios han manifestado que la ubicación más adecuada para un nuevo proyecto de campo sería el actual campo de hierba natural de O Xestal.

Una propuesta que comparte ReC pero "lo que se debe hacer es un ejercicio de consulta y comunicación con el tejido deportivo, con padres de usuarios y con el tejido futbolístico del municipio para llegar a una propuesta de consenso", apunta Fidalgo.