El proyecto de la futura estación intermodal del AVE, presentado por el Ministerio de Fomento, se convierte en un asunto de enfrentamiento entre el gobierno municipal y el grupo socialista, como así lo puso de manifiesto su portavoz, José Ángel Vázquez Barquero, al denunciar "recortes" que afectarán directamente a la funcionalidad e integración de los servicios. Y advierte que se trata de un diseño que provocará "serios problemas de circulación", además de mantener esa "ruptura" entre los dos barrios: el de A Ponte -donde se mantendrá la estación- y el de O Vinteún.
Una versión totalmente opuesta mantiene el concejal de Urbanismo, José Cudeiro, que después de rechazar las críticas de los socialista, califica el proyecto de Fomento de "realista, en función de los criterios económicos", pero que "cumple con todas las necesidades para dar respuesta a los servicios". Además de discrepar con Barquero sobre la "permeabilidad" y comunicación entre los dos barrios.
Otra de las cuestiones en la que incidía en su comparencia de ayer el portavoz socialista es la diferencia que existe en el proyecto inicial de estación intermodal, de 2011, vía concurso que ganaba el arquitecto Norman Foster, y el actual. En este sentido, advierte que el coste entonces era de 67 millones de euros, que "criticó el Partido Popular por ser muy caro", mientras que ahora, el que presenta el Ministerio de Fomento, supera los 151 millones de euros, que "es supera tres veces más su coste", indica.
Unas cuentas que para el edil de Urbanismo "no se ajustan a la realidad", debido a que el anterior proyecto, incluida la cubrición de las vías y la conexión entre los dos barrios "superaba los 300 millones de euros", por lo que ahora "se reduce a la mitad su coste", y destaca que "se mantiene el arquitecto que había ganado el concurso, pero ajustado a la realidad".
Integración de servicios
En lo que también se incide por parte del portavoz socialista es que con el proyecto que presenta Fomento y que será objeto de exposición pública, "se pierde la intermodalidad real", en referencia a que "estarán desconectados los diferentes servicios", y alerta de que "se producirán serios problemas de circulación".
Para Barquero "no es de recibo" que se lleve a cabo un "lavado de cara del actual edificio de la estación Empalme con la construcción de una pérgola que cuesta 10 millones de euros". Sobre esta cuestión sentencia: "Es una operación de maquillaje. Un pendello, al estar conectada la estación de autobuses con la del tren a través de una pasarela acristalada".
Por lo que sostiene Barquero que "estamos ante una visión raquítica del gobierno popular, que supone perder una gran oportunidad para el futuro desarrollo económico de la ciudad y provincia".
Una visión de lo más negativa de un proyecto de estación intermodal con el que está en total desacuerdo el responsable del área de Urbanismo, que demás de dejar patente la "satisfacción" del gobierno municipal con él mismo, asegura que "se cumplen con creces todas las funciones de la intermodalidad", y destaca la importancia que tiene la construcción de una aparcamiento subterráneo con 300 plazas.
Y aunque Barquero alude a la "discriminación" que existe con el proyecto en otras ciudades gallegas, Cudeiro contrapone que "no tendrá coste alguno para el concello, algo que no sucede en el resto de ciudades".
