Los consejos reguladores de las denominaciones de origen de Valdeorras, Monterrei y Ribeiro elevaron ayer formalmente de forma conjunta ante el Gobierno Central y la Xunta de Galicia, su petición de declaración de zona catastrófica para todos los territorios amparados bajo estas tres denominaciones vitivinícolas , para hacer frente a las fuertes pérdidas causadas por las heladas registradas en las noches del 26 y 27 de abril, que diezmaron gravemente la cosecha de la próxima campaña.
Las tres denominaciones habían adelantado esa posibilidad durante su reciente encuentro en la feria del vino Fenavin el pasado viernes y ayer lo levaron oficialmente a la práctica solicitando ante ante el Gobierno central y la Xunta de Galicia, la solicitud de declaración de zona catastrófica (actualmente denominada zona de emergencia) para sus territorios amparados.
Daños desiguales
Este "annus horribilis" para el sector del vino en la provincia, se ha plasmado en diferentes porcentajes de afectación, que como bien india el presidente del Consello Regulador de la D.O. Ribeiro, Felicísimo Pereira, porcentaje que se obtiene "tras hacer una media de los daños de cada denominación, en las que puede haber fincas que, por su ubicación quedaron casi intactas y otras en la que se perdió el 80% la cosecha" explica.
Así la estimación de pérdidas de producción es del 55% de los cultivos de vid en O Ribeiro, un 63% de los de la D.O. de Valdeorras y un 75% de los de Monterrei (tal y como se expone en los informes técnicos remitidos al Gobierno central y a la Xunta).
Las tres denominaciones de origen unidas, no sólo instan a proceder a la declaración de zona catastrófica en sus territorios, "sino que también solicitan líneas de ayudas para los viticultores y para las bodegas amparadas bajo su sello de calidad" explican.
Inicialmente no se sumó a esta petición conjunta la D.O. Ribeira Sacra, que comparte territorio entre Ourense y Lugo, porque los daños fueron mucho menores que estas otras D.O.
Las tres denominaciones afectadas suman más de 4.000 hectáreas de superficie explotada para la viticultura, de ellas la mayor parte, más de 2.600 hectáreas se encuentran solo en la D.O. Ribeiro. Las tres denominaciones suman más de 170 bodegas la mayoría también estarían en Ribadavia.
Por su parte el presidente del Consejo Regulador de la D.O. Valdeorras, Francisco García, optaba ayer "por el optimismo,. de que esta unión puede suponer ayudas para las zonas afectadas". Solo en Valdeorras hay más de 1.100 hectáreas y los daños son para todos los sectores de la comarca".
