Vecinos del centro de la ciudad muestran su preocupación por "la supresión" del baldeo de calles en esta zona, al comprobar que proliferan en las aceras manchas de deposiciones de perros -aunque sus propietarios lleven bolsas para realizar la recogida correspondiente- y de pájaros. El Concello confirma que debido a la situación de prealerta por sequía, "se ha reducido el consumo de agua para el baldeo en un 75%", atendiendo las directrices que ha dado la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil. Durante la Semana Santa habrá alguna excepción -apenas percibida por los vecinos-, pero a partir del día 19 no se harán más baldeos, de lunes a viernes. Los responsables municipales esperan paliar la situación mediante el barrido de calles y lavado de contenedores. La Federación Limiar ha preguntado sobre este problema.
