Los datos aportados por el Observatorio Económico Ourensán revelan que las comarcas de Terra de Celanova y Baixa Limia lideran la regeneración laboral en la provincia de Ourense. En la primera repuntó un 1,7 por ciento, y en la segunda creció un 3,5 en 2016, siendo el mejor registro comarcal.

El consistorio de Celanova recibió ayer al presidente de la Diputación, Manuel Baltar, al profesor de la Universidad de Vigo, Andrés Mazaira, y al gerente del Inorde, José Manuel Rodríguez, que expusieron los datos del informe socio-económico, y que constata que el mercado laboral creció en la Baixa Limia y en Terra de Celanova, y que según Baltar hacen que A Limia, Terra de Celanova y A Baixa Limia tengan 10 de los 53 concellos que presentan creación neta de empleo en 2016, "un signo de que las tres comarcas aceleran el paso de la recuperación".

Añade que el Observatorio identifica a Terra de Celanova y a la Baixa Limia "como dos claros ejemplos de territorios que están a rentabilizar la regeneración económica y laboral". En la fase intensa de la crisis, entre 2011 y 2013, la comarca de Celanova fue la segunda que perdió más empleo, y A Baixa Limia figuraba como la tercera más castigada. Pero la situación cambió "hasta el punto de que a Baixa Limia lideró en 2016 la creación neta de empleo en provincia, con un auge del 3,5, a más del doble de velocidad que la media ourensana (1,5)".

Asimismo, Terra de Celanova amplió su mercado en un 1,7, a un ritmo casi idéntico al de la comarca de Ourense, y un 3,6 en la actual fase de regeneración, desde mediados de 2014. Las proyecciones del Observatorio anticipan que cuando arranque el segundo semestre de 2018, esta comarca tendrá de nuevo los 5.000 empleos, de los que está apartada desde finales de 2012.

En su intervención Mazaira explicó que seis concellos celanoveses generaron empleo neto en 2016, entre ellos Celanova, "que se convirtió en la cuarta mejor cabecera comarcal de la provincia, con una subida del 2,8". Pero las alzas aún fueron mayores en Ramirás (4,2) y A Bola (3,4). Los cuatro descensos registrados oscilaron entre el -2,3 de Pontedeva y el -0,8 que compartieron Quintela de Leirado y A Merca. Según Mazaira "en su conjunto Terra de Celanova sostiene el 4,8 por ciento del empleo total de la provincia".

Y en la Baixa Limia, a pesar de ser la segunda comarca que está regenerando empleo a más fuerte ritmo desde el inicio de la recuperación, se detecta que "aún precisará tres años completos para que su mercado retorne a la dimensión que tenía en 2011, cuando cediera la barrera de las 2.000 afiliaciones".

Entre sus concellos solo la cabecera comarcal perdió empleo en 2016. Bande acortó su mercado en 1,2, en contraste con el 8,1 de ampliación en Entrimo, con el 5,5 de Muíños y el 4,2 de Lobios. En cambio, Lobeira conservó los cerca de 200 del año anterior.

En la comarca de A Limia el Observatorio apunta que la regeneración de empleo transita a una velocidad anual del 1,1, casi medio punto por debajo de la media provincial. En el acumulado el avance está en 1,8 cuando la media ourensana supera ligeramente el 4. En este caso, se prevén 5 años para la reconquista de los 6.500 empleos de 2011.

Pero siete de sus once concellos están creando empleo neto y dos tienen plaza en el ranking de los diez grandes generadores laborales de la provincia. De hecho Baltar fue en 2016 el de mayor crecimiento (14,5) de toda la provincia, y Porqueira (6,1) ocupó el sexto puesto. A Limia aportó la sexta parte de los generadores ourensanos que superaron el 5 por ciento de crecimiento. Siguieron Trasmiras (4,8) y Sandiás (4,5). Xinzo impulsó un 0,8 y con 3.218 afiliaciones, concentra el 52,3 de todo el empleo de la comarca. Y las evoluciones negativas son de Vilar de Barrio (-9,2), Calvos de Randín (-3,8) y Os Blancos (-2,9).

En A Baixa Limia se creó un 6,7 de empleo neto en 2016, en A Limia un 2,3 y en Terra de Celanova un 1,4. En A Baixa Limia destacan sus cinco concellos, con incrementos muy significativos en Lobeira (19,2), en A Limia,Porqueira impulsó un 48,7, y en Terra de Celanova sobresalen A Bola (12,5) y Verea (6,1).

En la evolución del paro, las tres comarcas aceleraron a fuerte ritmo las reducciones en 2016. En un año A Limia pasó de una diminución del 1,3 al 12,9, A Baixa Limia del -9 al -0,2, y Terra de Celanova del -7,8 al -11,6, a pesar de que las cabeceras comarcales están entre las cuatro de la provincia que menos redujeron . Celanova un -5, Bande -7,8 y Xinzo -8,1, mientras que Verín anota la bajada más suave, -4,5, entre las doce cabeceras.