La Autoridad Portuaria de Vigo denunció ayer que el Puesto de Inspección Fronteriza (PIF) está "batiendo récords de intransigencia" en la importación de mercancías. Enrique López Veiga reveló que 100 contenedores de pota que venían para Vigo "no entrarán por aquí o lo harán por Leixões" ante las trabas documentales del puesto vigués que ya la semana pasada bloquearon la entrada de 21 contenedores de China.

Veiga mantiene contacto constante con el Ministerio de Sanidad, cuyo departamento de Sanidad Exterior en el PIF copa la mayoría de las críticas por parte de los empresarios. Y aunque confía en contar con una solución "en un mes o así" y que "este problema se arregle de una vez y para siempre", advirtió que habrá "responsabilidades sobre ciertas actitudes".

El dirigente portuario duda de los criterios usados por los inspectores vigueses poniendo ejemplo que unos contenedores que no pueden acceder por Vigo sí pueden hacerlo por Leixões. "¿Es que realmente hay un colectivo emperrado en que Vigo deje de ser el centro de distribución de la pesca congelada y de la industria de transformación?", se pregunta.