El sistema "Lexnet" facilita las notificaciones de los juzgados a las partes a través de un sistema informático que funciona como un correo electrónico, aunque a veces se atasque para malestar de procuradores y abogados. Una año después de su implantación generalizada y la intención de reducir las pilas de folios en las sedes con el llamado "Papel 0", basta una visual por cualquier oficina para comprobar que los expedientes gruesos siguen ahí. Los funcionarios se quejan de que el papel que antes imprimían los operadores privados para registrar los juzgados, han de generarlo ellos en la administración para trabajar de forma operativa y facilitar copias a las partes. El volumen es considerable en una sede civil, donde las demandas se acompañan de anexos y diversos documentos.

El sindicato UGT ha puesto cifras al incremento de gasto en impresión de los últimos años. Extrapolando el muestreo de un juzgado a los 32 tribunales de la provincia, la central calcula que el gasto en impresiones fue de hasta 499.200 euros el año pasado. Es la cifra resultante si se aplica un precio por copia de 0,08 euros. Si es de 0,05, el dato se reduce a 312.000 euros en todas las sedes. UGT dice que el gasto de impresión puede variar dependiendo del volumen de copias e incluye mantenimiento y revisiones de tóner o cartuchos de tinta.

Según los datos globales calculados a partir del funcionamiento de un juzgado, el incremento de costes desde 2013 ha subido un 143%, al pasar de un máximo de 204.800 euros para toda la provincia a 499.200. Según el sindicato, los 32 juzgados de Ourense consumen ahora 6,24 millones de folios al año, cuando en 2013 fueron 2,56. El juzgado analizado por UGT pasó de necesitar 85. 000 folios en el año 2014, con un coste máximo en impresiones de 6.800 euros, a utilizar unos 195.000 el año pasado, aumentando el gasto a un máximo de 15.600 euros.

"En incontables ocasiones hemos denunciado que Lexnet va a suponer el colapso de la administración de justicia y ha supuesto un trasvase de gasto privado a público causando un gran sobrecoste", expresa el responsable en Galicia de UGT-Justicia, Manuel Carvajal.

Ofrecen un móvil para grabar

El sindicato, por otra parte, critica la falta de inversión en materia tecnológica, "que es fundamental para mejorar el funcionamiento de un servicio esencial como la administración de justicia, pero esta implantación tiene que ser gradual, con medios personales, técnicos y formación adecuada". UGT se queja de que "la falta de medios técnicos queda patente estos días con lo ocurrido en los Juzgados de Ribadavia". Asegura que el equipo de grabación enviado para solucionar problemas con anterioridad es del año 2003, "por lo que acabó causando más problemas que el anterior". Según el sindicato las incidencias son variadas y se resumen en problemas de imagen y sonido y errores en la grabación que llegan a dejar sesiones incompletas. Los problemas, que la Xunta conoce según UGT, "llegaron a situaciones "kafkianas" en las cuales algún profesional se ofreció a grabar los juicios con su móvil".

Las deficiencias del audio y la imposibilidad de copiar la vista grabada a CD -una garantía para los recursos- , obligó a decretar la nulidad de actuaciones y repetir esta misma semana -el martes 14- un juicio de marzo de 2016. Según la Asociación Madrileña de la Mediación, cada vista, por pequeña que sea, supone un desembolso medio de 3.000 euros para las arcas públicas.