S. V. S., un ganadero de Muiños de 37 años, está citado a declarar esta mañana ante la juez de Bande, en calidad de investigado por uno de los mayores incendios forestales del verano. La Guardia Civil lo detuvo ayer como presunto autor del frente que afectó a 800 hectáreas a principios de septiembre en la parroquia de Requiás (Muiños). Hubo que desalojar a vecinos, ardieron alpendres y se vio afectado el Parque Natural del Xurés. El sospechoso, vecino de Guntumil, se acogió a su derecho a no declarar en el cuartel de Lobios, según fuentes de la Guardia Civil.
El fuego exigió a los medios de extinción de la Xunta y obligó a la Consellería de Medio Rural a decretar el nivel 2 de peligro por proximidad de las llamas a las viviendas en la aldea de Requiás, que tuvo que ser desalojada. Las inspecciones técnico-oculares realizadas por los agentes del instituto armado determinaron que el fuego había sido provocado, al ser localizados varios focos de inicio "estratégicamente distribuidos" en una zona dedicada al pastoreo vacuno, según la Guardia Civil. La operación fue bautizada como "Eufemia".
Fuentes del cuerpo señalan que varios vecinos habrían situado al sospechoso en la zona de inicio de los incendios. Según el alcalde de Muiños, Plácido Álvarez (PP), hubo 4 focos simultáneos que apuntaban a un incendio intencionado. Eleva la superficie afectada a cerca de 1.000 hectáreas. El regidor mostraba ayer su "sorpresa" por la detención del vecino, propietario de unas 60 cabezas de ganado vacuno en pastoreo extensivo. Sobre un supuesto interés en ganar zonas de alimento, Álvarez recuerda que la ley prohíbe llevar al ganado a terreno quemado El regidor respeta la labor de la Guardia Civil pero también aboga por la presunción de inocencia del detenido.
La gravedad de este incendio forestal, registrado en los primeros días de septiembre en medio de una oleada de fuegos que afectó con especial relevancia al Xurés, llevó a la Guardia Civil a desplazar gran cantidad de efectivos a las inmediaciones, "pues el peligro era patente". Durante varios días el frente estuvo activo. La extinción fue complicada debido a las orografía y las condiciones meteorológicas adversas. Quedó extinguido después de una semana y aunque no hubo que lamentar daños personales, sí se produjeron pérdidas en galpones y el medio ambiente.
Antecedentes por un robo
El presunto autor del fuego tiene un antecedente por haber robado presuntamente placas solares, según la Guardia Civil.
