En Cudeiro, una de las parroquias rurales del concello de Ourense, residen casi 1.000 personas. Más de un centenar cumple cada domingo con la eucaristía, calcula el sacerdote Emilio Fernández, que el miércoles cumple 52 años desde su ordenación. El cura ofició ayer una misa especial a la que asistieron aún más fieles si cabe y algún ilustre, como el alcalde Jesús Vázquez. Tras una restauración financiada por la Xunta, la iglesia parroquial de San Pedro estrenaba en la eucaristía de ayer uno de sus retablos, el de la parte izquierda de la nave central, de estilo barroco, datado en el siglo XVIII y dedicado a la Virgen de las Candelas. La recuperación del conjunto costó unos 12.500 euros, asumidos por la administración, más otra cantidad sufragada por los devotos para la restauración de las imágenes.
La obra de mejora del retablo terminó hace dos semanas pero los últimos detalles no estuvieron listos hasta ayer. La empresa restauradora, con sede en Vigo, se desplazó en domingo a Cudeiro para entregar la imagen de San José y la de uno de los ángeles del retablo izquierdo. Las tallas tuvieron que pasar por el taller. Se aprovecharon los trabajos de restauración para devolver el máximo esplendor posible a las representaciones de los santos, retirando el óxido, el polvo o aplicando alguna nueva impresión para mejorar su apariencia. "Para la misa de 12 estaba todo de punta en blanco; fue totalmente de estrena", dice el cura, satisfecho.
Pinturas de varios siglos ocultas
La restauración sacó a la luz pinturas que podrían tener varios siglos. Al limpiar la parte central del retablo, donde está la hornacina de la virgen, apareció un mural de apariencia gótica de San Juan Bautista, datado entre el siglo XIV y XVI. La iglesia románica de San Pedro tiene otros dos retablos. El mayor data del XVI y es de estilo manierista, siendo una de las pocas representaciones en la provincia. Restaurado hace 18 años. Tiene pinturas de Cornelius de Holanda, que trabajó en la capilla del Santo Cristo de la Catedral de Ourense y en la seo de Lugo. El retablo derecho es barroco. Cudeiro aspira a recuperarlo en 2017 con una nueva ayuda pública.