El mal tiempo deslució ayer las celebración de los magostos en Ourense, pero no impidió que miles de pandillas, familias y muchas asociaciones de vecinos, renovaran el rito anual de las castañas, el vino nuevo y los chorizos, eso si bajo cubierta.

De este modo la "enchenta" pantagruélica que cada san Martiño siembra el entorno de Ourense hasta Montealegre de las lenguas humeantes de las hogueras, se quedaron en casa al calor de las bodegas, o en los locales de las asociaciones de vecinos.

Ayer sábado le tocó el turno de celebrar a San Martín y su magosto a muchas asociaciones de vecinos, algunas de las cuales recibieron la visita del alcalde, Jesús Vázquez y otros miembros como ocurrió con las asociaciones de vecinos de A Granxa, O Barrio, Santa Mariña do Monte, Portovello, Polvorín, Ribeira Miño, As Laxas e da Asociación Cultural Beiro.

En la Plaza de Pena Vixía el colectivo Auria Bela celebró su magosto 2016 con un amplio menú en el que no faltaron la empanadas, el jamón, quesos, embutidos, pulpo con cachelos, carne o caldeiro, cañas las inevitables castañas, café de pota vino y hasta caldo para los cuerpos más frioleros.

En este caso no les dio miedo el agua y mantuvieron la cita en plena plaza de Pena Vixía . Finalmente la lluvia dejó paso ayer a unas temperaturas más templadas en días pasados lo que prolongó la fiesta hasta la madrugada

Si bien hoy domingo volverán a celebrarse las últimas citas con la tradicional fiestas del Magosto la visita "oficial" de los concejales se producirá esta tarde al magosto de la asociación vecinal Carlasca en el barrio de A Carballeira.