El concurso Internacional itinerante "Tempranillos al Mundo 2016" y el Certamen Internacional de Vinos Gallegos convierten a Ourense en el escaparate y lugar de encuentro con los buenos vinos. Un evento que organizan la Federación Española de Asociaciones de Enólogos (FEAE) y la Asociación Gallega de Enólogos (AGE), y que se celebra en el Centro Cultural "Marcos Valcárcel" desde el 8 al 10 de noviembre.

Para el secretario de la asociación gallega de enólogos, Pablo Estévez, conseguir que el concurso internacional se celebrase en Ourense "supuso un esfuerzo importante", después de celebrase Nueva York , Colonia y Lisboa, en los diez años que se viene celebrando.

Cinco denominaciones

Y aunque reconoce que en Galicia la variedad tempranillo no tiene una gran producción, siendo la de Monterrei la que cuenta con mayor número, uno de los argumentos que inclinaron la balance es que Galicia cuente con cinco denominaciones de origen, de las que cuatro están ubicadas en la provincia de Ourense.

De ahí que también se decidió celebrar el certamen internacional de catas de vinos gallegos. Una acción que como subraya pretende seguir la senda de avanzar en la cultura del vino, así como en ea apuestas de internacionalización de los vinos gallegos. Sobre esta cuestión, Pablo Estévez reconoce que se "avanzó mucho", pero advierte que queda bastante camino por recorrer.

Un apuesta que está directamente ligada con la reconversión de viñedos que se lleva realizando en los últimos años, en la que una de las piezas claves son las variedades autóctonas. Un valor añadido de unos vinos que se posicionan en mercados.

De ahí que la celebración en Ourense del concurso internacional "Temparnillos al mundo", que contará con la presencia de reconocidos especialistas y enólogos de todos el mundo, supone una importante oportunidad para presentar los vinos gallegos a través del certamen de catas que se programó.

Tiene claro el secretario de la asociación gallega de enólogos que la internacionalización de los vinos gallegos sigue siendo esa particular asignatura pendiente que tiene el sector vitivinícola en Galicia. Y reconoce que los que tienen mayor dificultad para asentarse y competir en mercados internacionales son las bodegas pequeñas, debido a su producción limitada. Pero eso no debe impedir mostrar la calidad de los vinos con que cuenta Galicia.

Es por lo que espera que los dos eventos que se celebrarán en Ourense, tanto el concurso como el certamen contribuyan, por una parte a proyectar "nuestro vinos", y por otra, como un estimulo para seguir dando paso que redunden en la consolidación de un trabajo que mejoró la calidad y la imagen.