Casi dos años después de la rehabilitación del antiguo mercado de la Plaza de Abastos número 2 de A Ponte, y de un proceso de concurso que quedó desierto, por falta de empresas interesadas en gestionarlo, el Concello de Ourense lo vuelve a intentar y licita por 45.000 euros anuales, un poco menos que en el concurso anterior y por un máximo de diez años de concesión, la explotación integral de este popular mercado.
El pliego de condiciones ya está elaborado y los aspirantes tendrán que encargarse de gestionar los ocho puestos de venta que están previstos en su interior, y en las modalidades que el concello le exige: una frutería; una quesería; una vinoteca; una pescadería; una carnicería; una charcutería; una panadería y un puesto de delicatessen.
Además ha de destinar a zona de restauración y bar, que dispondrán de un espacio de 4, 80 metros cuadrados y reservar otros 20,10 metros más para cocina. El pliego, que acaba de colgar en su web el Concello de Ourense en el apartado de concursos, obliga también al futuro adjudicatario, a destinar 150 metros cuadrados para degustación de los productos que tienen que venderse allí tras ser cocinados.
Este es precisamente el espíritu de un costoso proyecto de remodelación de la plaza que pagó Fomento, que comenzó ya con el bipartito, cuyo remate de obras fue inaugurado el 19 de febrero de 2015 por la entonces ministra de Fomento, Ana Pastor, siendo el alcalde el socialista Agustín Fernández pero que no salió a concurso hasta la llegada del PP al Concello. Eso sí utilizando los pliegos que había heredado del gobierno socialista. Ese primer concurso tuvo "cero" ofertas de de empresas interesadas.
Ahora este mercado sigue buscando "novios" con un nuevo concurso que pide un mínimo 45.41O IVA incluido de canon anual a la posible adjudicataria. El precio máximo rondaría los 450.000 euros, dado por 8 años, prorrogable hasta un máximo de 10 años de concesión.
La difícil tarea de hallar candidatos se ha encontrado con la oposición de grupos como DO que pide que sea el propio Concello el que lo gestione. Pero la costosa remodelación ha dejado en el interior un espacio diáfano, que prácticamente no tiene más que paredes, todo el resto de sistemas de calefacción, refrigeración, mobiliario y otros corre a cargo del adjudicatario.
Las bases son leoninas: "Todo el personal que sea contratado por el adjudicatario, dependerá exclusivamente de este, y el ayuntamiento no tendrá relación jurídica ni laboral respecto al mismo, ni durante la vigencia del contrato ni al término de él", explican
Además el posible adjudicatario, debe de asegurar no solo que todo los puestos se dedican a comercio minorista, sino que el producto que se venda en ellos "sea fresco y de calidad y con ellos se elaboren los menús de los puestos de restauración" .
El horario debe de ser de un mínimo de 12 horas diarias durante los siete días de semana y en el caso de los puestos de venta, deben abrir al público un mínimo de 8 horas al día. Otra de las condiciones de la concesión obliga a "gestionar el mercado de forma innovadora", llevar todo lo referente a publicidad y cartelería y "los trabajadores deben ir debidamente uniformados con indumentaria adaptada a cada una de las góndolas comerciales". Se valora con la máxima puntuación, 70 puntos la firma que ofrezca el más alto canon anual.
Entre las propuestas orientativas que dan el pliego a los posibles aspirantes, está la posibilidad de realizar campañas de dinamización de la plaza, como catas de vino, semanas sobre un producto o menú determinado, puestos móviles de productos de temporada, cursos de cocina, dietas, música proyecciones o exposiciones.
La imaginación la pone el adjudicatario. Las empresas interesadas en explotar esta plaza de abastos que pretende ofrecer una oferta dinámica de venta, degustación y lúdica, como en los nuevos mercados cosmopolitas, tendrán quince días para presentar sus ofertas, a contar desde el momento en el que el concurso sea publicado en el Boletín Oficial de la Provincia, o en el Diario Oficial de Galicia, algo que va a ser inminente.
