La Confederación Intersindical Galega denuncia que la remunicipalización del servicio de limpieza de colegios públicos del Concello de O Carballiño motivó el despido de cinco trabajadoras de esa función, y que esperan que el gobierno municipal rectifique la decisión. Critica que de poco vale llevar a cabo una política nominalmente progresista si no va acompañada del respeto más elemental por aquellos a quien se dice defender. Por ello, solicita al concello que abandone su negativa y atienda la reclamación de estas mujeres en "muy difícil situación", teniendo en cuenta que "hay varias situaciones de especial vulnerabilidad y mismo familias monoparentales".

La CIG dice que el grupo de gobierno socialista decidió "rescatar" el servicio de limpieza de los centros escolares y dejó relegadas a las cinco mulleres trabajaban para la empresa Clece. Y aunque desde el primer momento el sindicato intentó su readmisión, el concello "se escuda en su condición de entidad pública para no acatar el convenio, que contempla la subrogación en el caso de cambios de titularidad de empresa". Por eso, su propuesta a consistió en que la institución se personara en el acto de conciliación y readmitiera las cinco trabajadoras "como personal indefinido" mientras no se convoque un concurso-oposición "según los principios de igualdad, mérito y capacidad".

Indica que después de diferentes conversaciones, en las que parecía que el concello entraba en razones, "pasadas las elecciones "no se personaron en la conciliación", resolviendo denegar las reclamaciones de las afectadas. Ante ello, Anxo Pérez Carballo, de la Ejecutiva Confederal d la CIG, apunta que "no es que suspendieran una oposición, es que ni siquiera se les dio una oportunidad para continuar en sus puestos", y fueron sustituidas "de forma aleatoria" desde el Servicio Público de Empleo

Ante ello, la CIG inició ya una ronda de contactos con los diferentes grupos municipales en busca de apoyos, además de llevar a cabo concentraciones delante del consistorio para visibilizar la problemática. Destaca el sindicalista que "si en lugar de cinco fueran cincuenta estamos seguros de que el gobierno municipal no se habría atrevido", no obstante, añade que "estamos a tiempo de solucionarlo".

La CIG apuesta decididamente por el rescate de servicios públicos pero "en beneficio de la clase trabajadora".