C. R. F., un hombre de 27 años, fue juzgado ayer en Ourense como presunto autor de un delito continuado de robo con fuerza en las cosas. Habría cometido casi una decena en establecimientos de la ciudad -salvo uno en el interior de un coche y otro en la bodega de un inmueble-, entre octubre y noviembre del año 2013. La Fiscalía pide una condena de 1 año y 8 meses de cárcel. También ve responsable a otro joven, L. C. S., por un presunto delito de receptación. Este último, de 25 años, se enfrenta a 6 meses por pagarle presuntamente 200 euros por una televisión que, según el fiscal, sabía que era robada.

La condena por la sucesión de robos llevaría incluida una responsabilidad civil. Si prospera la solicitud del ministerio público, el presunto ladrón tendrá que abonar en concepto de indemnizaciones una cantidad que se aproxima a los 14.000 euros.

Según el fiscal, C. R. F. operaba con el mismo proceder: forzaba el acceso a los locales y se apoderaba del dinero o los objetos de valor que hallara dentro. Actuaba siempre de madrugada. Por ejemplo, la noche del 15 de octubre, se llevó de un bar un televisor, 560 euros y unos altavoces. Los daños fueron cuantiosos y superaron los 2.600 euros. La noche del 13 de noviembre, en otro de los robos que se le atribuyen, presuntamente forzó la cerradura de una pastelería y se llevó 300 euros de la caja registradora. Una semana más tarde, la madrugada del 21 de noviembre, habría cometido un total de cuatro. En dos de los establecimientos elegidos no pudo entrar.