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Un centenar de vecinos se manifestaron contra la antena de telefonía en Maside

Se concentraron en la plaza del Concello en contra de la instalación móvil

Protesta vecinal. // Iñaki Osorio

Una vez más los vecinos de Garabás, en el Concello de Maside, se manifiestan en contra de la antena de telefonía móvil. Esta vez cerca de un centenar se concentraron el sábado, a las 18:00 horas, en la Plaza del Concello en rechazo a que dicha antena se instale a escasos cien metros de sus viviendas.

El manifiesto de protesta denunciaba el total abandono por parte de los responsables municipales de Maside. Abandono "agravado" por el hecho de ser ellos "los que solicitaron la recogida de firmas en contra de la antena".

Un gran vertido

Los vecinos de Garabás dicen que están perplejos por las numerosas irregularidades de todo este proceso. No entienden por qué desde el ayuntamiento no se les da ningún tipo de explicaciones, como la de un vertido de "cientos de toneladas de residuos tóxicos procedentes de escombros de la construcción, y permitió el acceso a una finca privada que fue invadida sin permiso de su propietaria, para la realización de las obras de instalación de la antena".

Denuncian que "la impunidad de posibles ilícitos urbanísticos y medioambientales" genera alarma y preocupación al colectivo afectado. Recuerdan que en septiembre de 2015 pusieron en conocimiento del alcalde la existencia de este vertido, y afirman que se comprometió a darles una solución.

Críticas de la plataforma

Representantes de Plataforma Masidá asistieron a esta protesta y reivindicaron que en un estado social y democrático de derecho "no es de recibo ser tildados como brazo político armado al servicio de ningún partido, por el hecho de ejercer un derecho constitucional, el derecho a asociarse".

Hizo saber al resto de los manifestantes que el vertido de residuos tóxicos ya está denunciado, y que no consentirán "las difamaciones insidiosas del alcalde", que los ha tachado de "brazo político armado al servicio del Partido Popular", porque señalan que además de ser "difamaciones que generan odio y animadversión contra un colectivo social, son radicalmente falsas".

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