El conductor de un vehículo que circulaba ayer por el kilómetro 224 de la autovía A-52 en dirección Vigo a la altura de la salida del polígono industrial vivió ayer un buen susto. Su coche empezó a arder y pudo salir a tiempo sin sufrir daños personales. Eso sí, se quedó sin vehículo, que quedó completamente calcinado.

Eran las 14,30 horas aproximadamente cuando el vehículo empezó a echar humo. El conductor tuvo tiempo y sangre fría para aparcar en el arcén, bajarse y avisar de la incidencia. Cuando llegaron los efectivos de Protección Civil de Barbadás, el coche estaba envuelto en llamas. El fuego, que pudo tener su origen en un cortocircuito, afectó también a la maleza pero la actuación de los efectivos evitó que se propagase por el monte.

Al operativo se sumaron también los Bomberos de Ourense, el GES de Pereiro y la Guardia Civil de Tráfico para garantizar la seguridad vial sin necesidad de cortar ningún carril. A las cuatro de la tarde se dio por finalizado el servicio.