La situación en la que se encuentra la concesionaria del servicio municipal de limpieza de colegios públicos, Linorsa, con el impago de salarios a las trabajadoras, y la falta de respuesta por parte de la empresa, llevó a que por parte del sindicato UGT se denuncie lo que califican como "pasividad" por parte del Concello y, sobre todo , del alcalde, Jesús Vázquez, que más allá de las "buenas palabras", sigue sin dar paso concretos para dar una solución a un problema "muy grave", debido a que muchas de las empleadas "están pasando serios apuros económicos".

Los problemas no son nuevos, ya que se vienen arrastrando desde el inicio de la adjudicación del servicio a Linorsa, a la que se le prorrogó por un año el contrato por parte del actual Gobierno municipal, alegando que no daba tiempo a sacar el nuevo pliego, y de lo que se trataba era de que el servicio se quedase "en precario", como sucede con otros.

Y aunque la solución pasaría por la cesión del servicio por parte de Linorsa a otra empresa, hasta que no se saque a concurso la nueva adjudicación, que según el Concello sería en un horizonte de tres meses, esa opción que se deberían haber concretado, como así se lo manifestó la empresa al alcalde, la realidad es que a día de hoy las trabajadoras siguen sin percibir sus nóminas, y el proceso quedó en suspenso. El problema estaría en quién asume las nóminas que están pendientes de ser abonadas a las trabajadoras

Es por eso que por parte del sindicato se anunció ayer, a través de un comunicado, que a partir del próximo martes, 19 de este mes, las trabajadoras van a iniciar concentraciones en la Plaza Mayor ante el Concello "para manifestarse ante esta situación pasiva por parte del alcalde y los responsables políticos", que consideran "no están ayudando a la solución del problema que afecta aun buen número de familias ourensanas que ven como no consiguen llegar a fin de mes".