Los concellos de Cenlle, Punxín y San Amaro aprobaron ayer en sus respectivos plenos la solicitud de asistencia técnica a la Deputación, que dirige José Manuel Baltar, para la puesta en marcha y gestión de las instalaciones de bombeo de agua desde el Miño hasta los respectivos ayuntamientos, luego de finalizar las obras promovidas por Aguas de Galicia.

Este proyecto se llevó a cabo en dos fases, una en 2009 por 1 millón euros, y otra en 2016 por 2,7 millones. Esta instalación garantiza el suministro de agua potabilizada a los ayuntamientos independientemente de posibles épocas de sequía. El agua es bombeada hasta un depósito de 500 metros cúbicos situado en el Monte San Trocado, punto más alto y desde ahí va por gravedad a los depósitos de los tres municipios.

Los tres concellos destacan que el modelo de gestión en baja de los respectivos ayuntamientos y el coste por metro cúbico facturado a los vecinos no varía y es totalmente independiente de la firma de este acuerdo. Después de manifestar el de Cenlle la incapacidad técnica y financiera para garantizar el servicio y la puesta en marcha de una instalación de tal envergadura, las tres partes solicitaron la Diputación una asistencia técnica, mientras continúan los trámites para la constitución de un Consorcio intermunicipal en el que se pretende que estén representados la Diputación, Xunta de Galicia y Confederación Hidrográfica. Una vez constituido este Consorcio y ya con datos reales del coste del funcionamiento de este bombeo, se decidirá el modo de gestión a varios años.

Los costes de esta asistencia técnica serán repercutidos a los tres ayuntamientos según su porcentaje de participación, en función del número de abonados y de los metros cúbicos de agua consumidos por cada uno. Los costes fijos como personal para mantenimiento diario y para guardias 24 horas los 365 días, control analítico, reactivos, coste de término fijo de potencia, y demás, serán para el caso de Cenlle el 40 por ciento de participación, para Punxín el 25 y San Amaro el 35. Y los costes variables, kilovatios consumidos (coste energético) será en función de los metros cúbicos de agua consumidos.

En el Concello de Punxín el PSOE señala que en con este acuerdo quedó "manifestamente claro el descoñecimiento, real o simulado, del alcalde" sobre el contenido del mismo, "teniendo en cuenta que fue el portavoz de Cambio Intelixente el que lo explicó". El PSOE defiende que la adhesión a este convenio es contraria a los intereses veciñales, conteniendo "costes incrementados de forma inxustificada, que, loxicamente, recaerán en los recibos".

Ante el voto de apoyo de CI ve contradicciones, al "no apoiar con sus acciónes lo que su portavoz venía defendendo en estos últimos años, abanderando un movemento veciñal en contra de la privatización del servicio del auga y forzando la salida de la empresa concesionaria del servicio en aquel momento".

Pero desde CI señalan que votó en función a unos datos oficiales que avalan que este convenio abaratará los costes y que resuleve el problema de cantidad y calidad del agua, y que tanto el PSOE como la Comisión Intermunicipal del Agua manejan datos escasos y que no aportaron. En el pleno propuso la enmienda de que en la Comisión de Control y Seguimiento de la Diputación además de los tres alcaldes participe un miembro más de la corporación municipal.