El Concello de Ribadavia tiene que tomar la decisión de renovar o no el contrato de la concesión del servicio de aguas a la empresa Aqualia, que concluye este verano, por lo que el edil de Hacienda, Javier Iglesias Sendín, señala que llevará este asunto a comisiones informativas y propondrá la creación de una comisión de portavoces, ya que quiere que la decisión que se tomé sea consensuada con los grupos de la oposición.

El grupo de gobierno facilitará en las comisiones informativas un informe sobre el servicio y el contrato que tenía una vigencia de 25 años. Sendín señala que antes de tomar cualquier decisión "se estudiará bien", ya que lo que prima es el interés vecinal. Comenta que él prefiere que sea de gestión pública pero que "los números hablarán". No obstante, aunque esa es su preferencia, está dispuesto a escuchar y tras un análisis promenorizado decidir lo que sea mejor para el concello.

Comenta que Aqualia hizo un buen trabajo, y que en los últimos años retribuyó económicamente a las arcas municipales cierta cantidad de dinero pero "el concello puede sacar más partida". Explica que el servicio mejoró mucho porque se hicieron muchas mejoras en la red de aguas por lo que ello benefició a la empresa y, por consiguiente, también debería redundar en las arcas municipales. Asimismo, aclara que aunque la tasa a los vecinos subió fue algo "ínfimo", y lo que más les aumentó el recibo fue el canon de la Xunta.