El Complejo Hospitalario Universitario de Ourense acaba de realizar la primera extracción de órganos de un donante ya fallecido, la primera de este tipo que se realiza en el CHUO y que ha permitido que de forma inmediata, otros dos pacientes, también gallegos y en lista de espera urgente, hayan recibido un riñón que mejorará su calidad y expectativas de vida. Además está la posibilidad de practicar extracción en personas, tras lo que se conoce como asistolia controlada.
Detrás del éxito de la primera extracción de órganos en paciente fallecido que se realiza en el CHUO y la tercera en hospitales gallegos, está un completo equipo de profesionales que se han coordinado al minuto, en este caso a través de la unidades de Medicina Intensiva y la Unidad de Coordinación de Transplantes, de Ourense, esta última dirigida por el doctor Juan Cortés, con que contó con el apoyo del equipo de transplantes del CHUAC, hasta 2015 único hospital de Galicia donde se realizaba este procedimiento.
Según el doctor Juan Cortés, los donantes en asistolia controlada o con el corazón parado son aquellos en los que se certifica la muerte porque ha habido un cese irreversible del latido cardiaco, "mientras que en el que el donante tradicional era el que había sufrido solo muerte encefálica" explica.
"Esta situación nos obliga a esperar los cinco minutos que exige la ley tras el paro cardiaco para decretar que el paciente ha fallecido, y tener ya organizado a todos los equipos, incluido el desplazado desde el CHUAC, e incluso al donante ya en quirófano, para iniciar el procedimiento sin demoras, pues al estar fallecido, debemos perfundir esos órganos que se van a extraer, e introducir unos líquidos que permitan que no pierdan sus condiciones", indica el doctor.
En este caso el equipo decidió que fueran extraídos solo los dos riñones al no parecerles el hígado óptimo para un transplante, a criterio del equipo.
La clave para garantizar esta rapidez es que "también el receptor del órgano debe estar siempre localizado y en este caso aún que hay una lista de ámbito nacional y se atiende en función de la urgencia del paciente, prima la proximidad geográfica para garantizar la rapidez en el traslado de esos órganos hasta el hospital de destino y por eso nuestros hospitales de referencia para el posterior transplante, son gallegos", el coordinador de la OCT de Ourense. De hecho órganos como el corazón y el pulmón tienen un corto plazo de unas cuatro horas para ser transplantados, mientras que hígado o riñón "tienen un poco más de espera" .
No deja de recalcar que para conseguir el éxito en una operación como está es imprescindible contar siempre con el apoyo y solidaridad de la familia del donante. "Siempre ofrecemos esa posibilidad a las familias del posible donante, pero sin su solidaridad, nada de esto sería posible".
