La implantación del transporte metropolitano en la comarca de Ourense, que inicialmente incluye a ocho concellos, incluido el de la capital, pasó de ser un objetivo a todo un reto, desde que hace cerca de veinte años se comenzase a plantear. Aunque en la última reunión de la conselleira de Infraestructuras, Ethel Vázquez, con los alcaldes de los municipios implicados, en la que presentó una propuesta de convenio, anunció su intención de que durante el presente año pueda ser una realidad, por el momento está pendiente de un acuerdo con el Concello de Ourense.
De ahí que el grupo socialista presentase ayer una iniciativa que lleva al pleno de marzo, en la que plantean que el gobierno municipal asuma compromisos en beneficio de la ciudad antes de firmar el convenio con la Xunta para implantar el transporte metropolitano. Y que pasarían por "asegurar expresa y claramente" en su articulado la reserva de la autonomía municipal y las competencias del Concello en todas aquellas cuestiones que puedan afectar al servicio municipal de transportes, la ordenación del tráfico y la movilidad.
Por otro parte, reclaman que en el futuro convenio se garantice el desarrollo efectivo y ordenado de las líneas interurbanas necesarias para asegurar la relación de la ciudad con las que denominan áreas económico-industriales de influencia, y a luden al Parque Tecnológico y los polígonos industriales de San Cibrao, Barreiro y el de Pereiro de Aguiar.
También reclaman al gobierno local que incluya en el diseño de metropolitano, como alternativa de transporte público a medio plazo, el compromiso de la Xunta de gestionar el actual corredor ferroviario por el centro de la ciudad que está previsto quede liberado con la llegada de la alta velocidad. Lo que ofrece la posibilidad de convertir dicho corredor en una línea de transporte intermunicipal.
Se trata, según explicó ayer el portavoz socialista José Ángel Vázquez Barquero, de una iniciativa que ya había manejado el anterior gobierno del PSOE dentro del documento de inicio del anteproyecto de Planeamiento de cara a al revisión y adaptación del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM).
Sostiene Barquero que se trata de una propuesta que está vigencia y es idoneidad, por lo que pide que se tenga en cuenta, sobre todo después de que fuera informada favorablemente por la Xunta y que la iniciativa ya se contemplara en el proyecto de PXOM aprobado inicialmente. Y advierte sobre que "no queremos que la claudicación sistemática del gobierno municipal ante las institución presididas por el Partido Popular continúe por más tiempo".
Los socialistas, que dicen ser partidarios de que se aborde el transporte metropolitano en un plan general de movilidad, por la relevancia que tiene, y por el que "siempre apostamos", entienden que se trata de un servicio que debe dar "una respuesta ordenada, planificada, operativa, socialmente útil y económicamente eficiente a las demandas de movilidad actuales y futuras de los ourensanos".
La propuesta que llevarán los socialista a pleno para su debate, también plantea que en ningún caso se puedan trasladar al Concello cargas económicas que correspondan a la Xunta, y que los acuerdos en ningún caso pueden cuestionar la autonomía municipal a la hora de ordenar el transporte urbano y la movilidad.
Una moción que, además de no ser vinculante, para que pueda ser aprobada dependerá de la postura que adopte el grupo de Democracia Ourensana, ya que de mantener su decisión de abstenerse en todas las que se presenten, como aconteció en el último pleno, los diez votos del grupo popular serían suficientes para tumbar la moción, ya que aunque a los 6 ediles socialistas se sumasen los 3 de OUC, quedarán en 9.
