Dos acusados de presuntos delitos de estafa y falso testimonio, el dueño de una vivienda que tenía en propiedad con su ex y el inquilino de la misma, negaron ayer haberse puesto de acuerdo para que el primero no abonase parte del alquiler a su exmujer correspondiente a los años previos a 2004, como pide la denunciante.
Los dos hombres se sentaron en el banquillo de la Audiencia Provincial de Ourense, acusados de participar en un intento de engaño a un juzgado para que la antigua esposa solo cobrase una parte de la renta que le correspondía. Se enfrentan a peticiones de penas que oscilan entre los 2 años y medio, para uno, y 6 meses para el otro.
Este juicio deriva de uno anterior celebrado en 2012. Entonces, la mujer demandó a su expareja ante el Juzgado de Primera Instancia Número 5 de Ourense, en fecha 20-09-2012, aduciendo que no había procedido al pago de las rentas entre los años 1999 y hasta el 2010. En dicho juicio, el acusado propuso como testigo al inquilino que firmó el contrato de alquiler de la vivienda, y que, a la postre, ha acabado también en el banquillo.
Para la Fiscalía, el acusado, tanto en su contestación a la demanda como durante el juicio, aportó dos contratos de arrendamiento sobre la vivienda de los años 2004 y 2010, "omitiendo conscientemente" aportar el contrato del año 1999 a fin de inducir presuntamente "a error" al juzgador, que dictó una sentencia en la que solamente reconoce las rentas debidas desde 2004, con el consiguiente perjuicio económico para la demandante.
Además, argumenta en su escrito que el inquilino prestó declaración "consciente de faltar a la verdad y en connivencia con el acusado" y declaró que se trasladó a vivir a ese piso en el año 2004, cuando realmente existía un contrato anterior de fecha 4 de agosto de 1999 firmado por la entonces esposa del acusado. "Todo ello provocó que de las rentas de 1999 a julio de 2004, la propietaria demandante no cobrase el 50% de las mismas", sostiene la Fiscalía, que mantuvo la acusación tras el juicio.
El inquilino sostuvo en sala que no recordaba en qué año había alquilado con su familia la vivienda y que solo después de prestar declaración en el primer juicio, tuvo constancia al comprobar la documentación de que lo había alquilado en una fecha anterior a la que había dicho inicialmente. Las defensas de ambos acusados pidieron la libre absolución para sus representantes en base al tiempo transcurrido desde lo ocurrido y, cuando fueron conocedores de lo sucedido, el propietario fue el primero que puso "interés", supuestamente, en abonar a la exmujer la "diferencia" que le debía respecto a la vivienda.
Por su parte, la ex mujer, que reside en Sevilla y prestó declaración por videoconferencia, ha aclarado que el piso lo tenían alquilado desde 1999, motivo por el cual le adeuda la mitad del alquiler desde ese año. La denunciante sólo pudo aportar un fax de su hermano diciendo "que tenían el piso alquilado desde 1999", aunque no llegó a presentar el contrato.
