En su derecho a la última palabra, J. M. B. Á., de 56 años, aseguró ayer en juicio que "nunca" tocó a una menor y supuesta víctima de abusos sexuales. La Fiscalía y la familia ratificaron su petición de una condena de 3 a 3 años y medio de prisión, lo que implicaría su ingreso entre rejas. Según la tesis del ministerio público, el hombre habría realizado tocamientos a una niña de 7 años aprovechando que su madre dormía.

La defensa niega los hechos, subraya que no hay testigos ni pruebas y que los informes de los forenses no encontraron signos de abuso. Pide la libre absolución.

Según el escrito de calificación de la Fiscalía, los hechos ocurrieron en las primera horas de la tarde del 13 de septiembre de 2014. El hombre se encontraba en el domicilio de la madre, en Ourense, al que había ido a pasar el día la hija menor de la mujer. Tenía 7 años por aquel entonces. La defensa sostiene que no eran pareja. La letrada dice que el varón estaba de alquiler y dejaba que ella viviera allí.

La Fiscalía ve probado que, cuando la madre se encontraba durmiendo la siesta en el sofá de la sala, el encausado entró presuntamente en la habitación de la niña e introdujo la mano por debajo de la ropa interior, llegando a tocarle los genitales. Según la versión que ve verosímil el ministerio público, el acusado conminó a la menor a hacer lo mismo porque "tenía que aprender". La niña se negó. A los pocos días contó los hechos a su tía. La familiar y el padre acudieron a la Comisaría a formular una denuncia.