Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El Miño triplicó su caudal en un día y el Sil y el Avia anegaron casas en O Barco y Ribadavia

Las piscinas de Oira y los paseos peatonales de las riberas, en la capital, están inundados

Casas anegadas por el Sil, en O Barco (Areas y Playa del Oro). // FdV

La situación de los ríos de la cuenca de Ourense es más que preocupante. La acumulación de agua por lluvia triplica los parámetros normales en días de precipitaciones y la crecida de caudales es alarmante en puntos críticos de la provincia como la comarca de O Ribeiro, Baños de Molgas, O Barco, la ciudad de As Burgas y algún punto de Monterrei.

El Avia, en nivel rojo de alerta, no pudo soportar más la crecida potenciada por la apertura de compuertas del embalse de Albarellos (al 82% de su capacidad) y el agua acabó entrando ayer en bajos y viviendas de A Quinza, donde el agua sobrepasó el puente, San Cristovo y A Veronza, cuya área recreativa está completamente cubierta. El Sil también anegó viviendas en O Barco, en Areas y Playa del Oro, con garajes y huertas inundadas.

El río Arnoia también ocupó el balneario de Baños de Molgas, en zona inundable, y en la capital, el río Miño, en situación de prealerta, ha adquirido niveles que el propio presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Marín, considera una "barbaridad", por lo que apela a la prudencia de la población a la hora de realizar paseos por las riberas, situación que también está siendo controlada en todos los puntos críticos de la provincia por parte de los efectivos de Protección Civil.

En solo 24 horas, del domingo al lunes, el Miño triplicó su caudal y ayer evacuaba 2.044 metros cúbicos por segundo, cuando desde el día de Reyes apenas había alcanzado los 600 en un par de picos. Durante la jornada de ayer llegó a crecer hasta los siete metros, cuando lo habitual son tres.

El río que cruza la capital de As Burgas ha cubierto las termas públicas de A Chavasqueira, O Tinteiro y Muíño da Veiga, pero también las piscinas públicas de Oira, las partes más bajas del paseo das Ninfas, la conocida como pista roja bajo el Puente Romano y parte de las riberas.

La CHMS trabaja con la previsión de que las precipitaciones se suavicen hoy pero es un alivio "para el corto plazo", aprecia Marín, ya que mañana "vuelve una borrasca y lloverá sobre mojado, si llueve como el fin de semana será malo porque la capacidad de retención ya es escasa, el suelo está muy saturado y todo lo que llueve va por escorrentía a los ríos". Marín apunta que los embalses prácticamente no pueden soportar más agua: "En una semana hemos pasado de una capacidad media del 54% al casi superar el 80%".

Compartir el artículo

stats