En un domingo de final de diciembre, helicópteros y brigadas de extinción de varios distritos, incluso de la Mariña lucense, tuvieron que movilizarse para atajar dos incendios forestales activos ayer en Ourense. Más de 250 hectáreas han ardido este mes en la provincia; cerca de 30 en dos frentes registrados ayer en extremos opuestos del territorio. El más peligroso seguía activo tras arrasar 25 en el concello de A Merca.

En la montaña de Pena Trevinca, en el extremo oriental e la provincia, ayuntamiento de Carballeda de Valdeorras, las llamas arrasaron terrenos protegidos de Red Natura en un frente llegado de Castilla y León. En esa zona está ubicado el mayor bosque de tejos del sur de Europa, el Teixadal de Casaio, uno de los parajes más singulares de Galicia. Las llamas no se acercaron, según informaron los técnicos a la Xunta. El frente empezó a las 13,45 horas y en territorio gallego quemó 4 hectáreas en la parroquia de Casaio. Actuaron un agente, 4 brigadas y, mientras hubo luz, un helicóptero.

Mientras, en A Merca, vecinos y brigadistas trabajaban para que el fuego no se aproximara a la aldea de Oxén. Rachas de viento cambiante dificultaron las labores de extinción. Al cierre de esta edición, el operativo seguía en marcha. Una pala bulldozer abría caminos y cortafuegos en un perímetro ampliado para impedir que el fuego llegara a ninguna población de la zona. Intervinieron 2 agentes -uno de ellos, el exalcalde de Rairiz-, 6 brigadas, 3 motobombas, 1 pala y 1 helicóptero de Toén. La superficie afectada, al cierre, era de unas 10 hectáreas, según la Xunta. Investigan si la causa fue una quema. En el inicio del operativo se contabilizaban dos focos, aunque el propio viento pudo diseminarlos.