Dentro de unos meses, la apertura del centro de salud de O Couto incrementará la afluencia actual de público, de unos 2.000 usuarios que, según UGT, resuelven gestiones en el nuevo edificio judicial, levantado en la parcela anexa. El sindicato, al frente de la junta de personal de justicia en Ourense, urge al Concello que subsane los problemas de comunicación que persisten siete meses después de la puesta en marcha del inmueble.
La central pide una conexión de autobús "que enlace las distintas líneas con esta zona", tras resaltar que "muchos de los usuarios del juzgado son personas mayores que vienen al Registro Civil o asisten como testigos o como parte a los juicios". Insta al Concello a que establezca un servicio en la zona "cuanto antes.
El juez decano, Leonardo Álvarez, asegura que ya el anterior alcalde, Agustín Fernández, comprometió la inclusión de la zona en el recorrido del transporte urbano. El concejal responsable, Pepe Araújo, explica que el lunes se constituirá la comisión de movilidad y que el estudio de nuevas conexiones será una de las materias principales.
Entre otra deficiencias observadas por UGT figura también la "necesidad de que pinte y señalice un paso de peatones en la zona de entrada del edificio, para poder acceder con mayor seguridad".
Además, el Concello de Ourense ha adjudicado la reforma de la calle Francisco de Llorens para facilitar el acceso de peatones y vehículos. El sindicato subraya que estas obras deben apurarse y cuestiona que la administración hubiera otorgado licencia de ocupación al inmueble judicial -después de su inauguración-, "sin que estuviera acondicionado". UGT recuerda que con las lluvias dicha zona de acceso se hará "totalmente intransitable, agravándose aún más los grandes problemas existentes, que pueden dar lugar a accidentes debido a la ausencia del firme y a la formación de socavones". Araújo asegura que los trabajos empezarán con carácter "inmediato".
La que ayer registró el sindicato, no es la única petición dirigida al Concello de Ourense para que implemente cambios en el entorno del nuevo juzgado. El decano remitió este mes un escrito para pedir que se regule un doble sentido de acceso al edificio, al menos en el tramo entre la entrada a la parte trasera del inmueble en la calle Bispo Lourenzo -donde se encuentra la zona de aparcamiento reservado y la entrada al subterráneo- y el cruce con Castro Canseco.
