Un plan de mejora extraordinario permitirá acometer, a título particular a la propia concesionaria del servicio, las obras urgentes de mejora de la flota del autobús urbano de Ourense a lo largo del próximo año, para que los autocares, con una media de nueve años de antigüedad, no se vean afectados por la demora -de al menos un año- prevista ahora para una nueva licitación del servicio municipal de transporte de la ciudad a causa de un nuevo imperativo legal.
La concesión actual ya expiró, pero antes de volver a licitar el servicio hay que anunciar durante un año en el Diario Oficial de la UE, el aviso de que el Concello de Ourense va a a sacar a concurso este servicio millonario por si quieren presentarse empresas europeas.
La posibilidad de ir comprando mientras tanto otros autobuses para reponer los que estén más deteriorados, es también compleja, pues aunque el coste de esa compra la financia la empresa privada, en este caso Urbanos de Ourense, tiene la obligación de convocar a su vez otro concurso, lo que complicaría aún más el proceso.
Es decir que pese a que la concesión actual que lleva la firma Urbanos de Ourense, está en situación de prorroga pues caducó en el mes de mayo de este año, el nuevo concurso está registrando récords históricos de usuarios, gracias en buena parte a los cambios de hábito impuestos por la crisis, que está llevando a más viajeros a subirse al bus en Ourense y dejar el coche en casa.
No hay fraude de ley sin embargo pues, según fuentes municipales, una directiva europea permite prorrogar hasta dos años la vigencia del contrato, sin incurrir en fraude, por lo que hasta mayo de 2017 no sería necesario proceder a una nueva concesión del servicio.
La normativa europea anunciada ayer en la Junta de Gobierno Local recuerda que el artículo 7.2 del Reglamento Comunitario Europeo, 1370/2007 de 23 de octubre, exige esa publicación en el Diario de la la UE de que va a procederse a esa nueva concurso.
7,5 millones de viajeros
Mientras, los datos del transporte urbano que gestiona Urbanos de Ourense, siguen creciendo y este año va a ser utilizado al remate de 2015 por 7,5 millones de viajeros según las previsiones
Esto quiere decir que cada año más de 20.500 viajeros y eso haciendo la media con los 365 días del año, es decir incluyendo sábados y domingos, se suben al bus urbano, según fuentes municipales, lo que supone un incremento del 3% respecto a pasados ejercicios.
El desgaste de los asientos, y ciertas cuestiones relacionadas con el desgaste del motor, son algunas de las deficiencias que presenta un parque móvil cuyos vehículos están sometidos a un desgaste más duro de lo habitual pues funcionan casi todo el día, y los arranques y paradas constantes suponen mayor daño para el motor que en otro autocar convencional.
