Ourense vivió ayer en pleno mayo una jornada tórrida, desde media mañana y hasta primera hora de la tarde, con temperaturas de más de 31 grados en la ciudad y las orillas fluviales a tope, como en una estampa de verano, para buscar alivio a una sensación térmica superior incluso a lo que indicaban los termómetros.
Pero no fue la ciudad la que colgó en esta ocasión el cartel de caldero térmico de Galicia, sino que el Concello de Leiro alcanzó los 32 grados en hora punta, es decir que sufrió el mayor repunte de calor solo superado por San Clodio en Lugo, que le "ganó" por una sola décima, 32,1 grados.
El tercer puesto de esta carrera del calor que cada año parece adelantarse en los termómetros, se lo llevó también un municipio de Ourense, Arnoia y concretamente la localidad de Remuíño, con 31,8 grados.
Ourense ciudad esta vez se quedó en el quinto puesto después de Millara en Lugo que alcanzó los 31,5 grados En la ciudad de As Burgas ayer las máximas fueron de 31,3 grados ayer. todo cuestión de décimas. "La ciudad no registró la máxima esta vez en ninguna de las estaciones que tenemos en la ciudad" advierte Ana Lage, meteoróloga de Meteogalicia.
Este servicio gallego de meteorología situó además a Millara, también en Lugo en el cuarto lugar con 31,5 grados y Ourense en el quinto lugar con las temperaturas más altas ayer, y esa media de 31,3 grados.
"El buen tiempo va a empezar a cambiar y a partir del jueves habrá un nuevo descenso de las temperaturas., pero podemos decir que no hay nada raro. Entra todo dentro de lo normal en esta época y no estamos viviendo cambio meteorológico extraño" indica la meteoróloga.
El hecho de que esta vez Ourense no se haya coronado como la provincia más tórrida es que esta ola de calor viene producida por una masa de aire cálido y y seco que procede de África "y es evidente que los que llevan el primer frente de calor son las provincias situadas más en el sur de España".
Mañana se superarán, según las previsiones realizadas también por MeteoGalicia, los 33 grados en algunos puntos de Ourense concretamente en Verín y en Leiro. Es decir una primavera muy agradable que nada tiene que ver con el carácter ventoso y lluvioso que se le atribuye al mes de mayo.
En cuanto a Ourense ciudad, está previsto que las temperaturas vuelvan a estar por encima de los 31 grados, con máximas de 30 el miércoles y una importante bajó hasta los 21 grados de máximas para el jueves, 14 de mayo, fecha en la que está prevista que vuelvan a reajutarse se las temperaturas.
"En todo caso ya es tiempo de abandonar el abrigo y las botas altas, pero aún vendrán días con ciertas precipitaciones y días frescos" advierte la meteoróloga.
