Los grupos municipales de la oposición trasladaron ayer vía enmiendas, cuyo plazo finalizó, su rechazo al proyecto de presupuestos para 2014 presentado por el gobierno socialista, de casi 104 millones de euros, y ponen sobre la mesa argumentos, tal y como había demandado en su momento el alcalde, Agustín Fernández, que dejaba abierta la puerta a un posible consenso, que todo indica que no se producirá.

Eso se desprende de la rotunda afirmación de los que fueron sus socios en el gobierno bipartito, el BNG, que no apoyarán un presupuesto que "carece" de perspectiva social y que, además, "no resuelve los problemas de la ciudad", agregan. Por su parte, los populares plantean un total de 38 enmiendas que ahorrarían 5,6 millones de euros, así como siete propuestas para destinar esa cifra al Plan de Inversiones Municipal, al pago del canon de Sogama, el Plan Estratégico Termal y la Agencia de Racionalización del gasto, entre otras.

Lo que plantean los populares es la supresión de varias partidas, por una cuantía económica superior a los 3,8 millones de euros, a la que añaden 14 enmiendas sobre la reducción del importe otras por importe total de algo más de 1,7 millones de euros. La adopción de ambas sugerencias supondría un ahorro superior a los 5,6 millones en el presupuesto municipal.

Por su parte, los nacionalistas presentaron cinco bloques de propuestas de enmiendas a los presupuestos como ejemplo de que se pueden hacer "más sociales" y que tengan como centro de las políticas a las personas. El BNG sostiene que Ourense no los tendrá por "falta de voluntad política" del grupo socialista, que, como advierten, gobierna el Concello en minoría.

Necesidades

Entre los argumentos que plasman los grupos de la oposición en su enmiendas, destaca la falta de un compromiso con las necesidades de actuaciones en los diferentes barrios de la ciudad que, junto con la promoción del empleo, deben constituir los ejes de la propuesta económica para la ciudad, como proclamó el portavoz del BNG, Xosé Somoza.

Para el portavoz popular, Rosendo Fernández, el proyecto no se puede apoyar y, después de recalcar que son los de la "insumisión" -en referencia al pago del canon de Sogama-, aunque mostró de nuevo "la mano tendida" a un acuerdo si se aceptan las enmiendas que presentaron, y con las que se pretenden "que sean realistas" y, de manera especial, que se "ajusten a la realidad que tenemos", en alusión directa a lo que consideran "gastos improductivos".

De ahí que tanto populares como nacionalistas, además de señalar esas partidas, que en algunos casos proponen suprimir y en otros rebajar, presenten sus propuestas con el objetivo de que sean una presupuestos que tengan una incidencia real en las necesidades de los ciudadanos. Y aunque los dos grupos apoyaron el Plan de Empleo municipal, consideran que se debe dar un impulso a aquellas actuaciones relacionadas con sectores estratégicos, como el termalismo, y un cambio en la política de personal.